MARCA.- La ola de protestas contra el racismo acaparó a todo deporte estadounidense. El primero en llevarlo fuera de las fronteras fue el jugador, Weston McKennie, quien, tras la muerte de George Floyd, decidió usar un brazalete en el brazo con el que exigía justicia cuando militaba en el Schalke 04.
Ahora, con la Juventus, el delantero estadounidense no piensa dejar lado el tema y en un video junto a Adidas reveló todos los actos racistas que ha enfrentado por su color de piel.
«Este año, al comienzo de la temporada, jugamos y los fanáticos después del juego me hacían ruidos de mono. Es devastador.
«Vuelvo a casa en Dallas y tengo miedo de conducir de noche solo porque no sé qué va a pasar si me paran. Estoy representando a un país que posiblemente ni siquiera me acepta por el color de mi piel».
McKennie continuó y explicó la razón por la que decidió unirse al Black Lives Matter, ya que teniendo su plataforma quiso crear conciencia en todo el mundo.
«Definitivamente es un poco desgarrador. Cuando usé el brazalete, sentí que era un deber y una responsabilidad: uno ser estadounidense y dos ser afroamericano. Simplemente sentí la necesidad de crear conciencia en el extranjero. Recibí mucho apoyo y también odio.
A pesar de que recibió muchas críticas, el seleccionado nacional mencionó que sin importar que sea futbolista o no, él va a seguir luchando contra el racismo.
«‘Eres un jugador de fútbol, no deberías estar haciendo declaraciones políticas’, y solo estoy pensando en mi cabeza: ‘No veo cómo esto es una declaración política en absoluto’. Una persona perdió la vida, no me voy a callar y regatear. No voy a hacer que mis opiniones sean pequeñas solo porque la gente crea que debería jugar al fútbol.
«No quiero que me conozcan solo como un gran futbolista. Quiero que me conozcan como un gran ser humano, como una gran persona y eso es lo que estoy empezando a intentar hacer, crear mi legado. Esta versión de mí que amo».
