FERNANDO PÉREZ ÁVILA. DIARIO DE SEVILLA.- La madrugada de este lunes ha estado cargada de tensión en Casariche. Como ya ocurrió hace justo un año en el cercano municipio de Pedrera, decenas de vecinos han intentado linchar a unos rumanos a los que habían sorprendido cuando, presuntamente, se disponían a cometer un robo en una vivienda de la localidad.
Los rumanos fueron vistos saltando por los tejados de unas casas, un hecho que hizo correr la voz de alarma entre los vecinos y que llevó a muchos de ellos a intentar tomarse la Justicia por su mano.
La Policía Local y la Guardia Civil detuvieron a uno de los presuntos ladrones, al que tuvieron que proteger en un edificio de la plaza de Triana del municipio. Allí se fueron congregando decenas de personas pidiendo a los agentes que soltaran al ladrón y se lo entregaran a ellos.
La Guardia Civil tuvo que mandar refuerzos para impedir un linchamiento. Una dotación del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS), los antidisturbios del instituto armado, se han desplegado por Casariche para controlar la situación.
La tensión entre los habitantes de Casariche y los rumanos del pueblo viene de lejos. Muchos de los vecinos acusan a los ciudadanos de este país del incremento de robos ocurrido en la zona. El pasado verano, la Guardia Civil desarticuló un grupo criminal que llevaba más de doce años cometiendo robos en este pueblo de la Sierra Sur de Sevilla, entre otras localidades. Fueron 40 los detenidos, que eran especialistas en la sustracción de productos fitosanitarios utilizados en las labores del campo.
Es exactamente el mismo argumento que llevó a decenas de residentes en Pedrera a destrozar coches y perseguir a rumanos en Pedrera hace justo un año. En aquella ocasión, la chispa fue un accidente de tráfico y una agresión posterior de tres ciudadanos de esta nacionalidad a un matrimonio pedrereño.