Un portavoz de los grandes almacenes Target, que gestiona el establecimiento, declaró que «no fue un acto deliberado, sino un error desafortunado que podría haberse evitado con más aclaraciones»
RUSSIA TODAY.- Una joven musulmana ha presentado cargos por discriminación contra un empleado de Starbucks que escribió las siglas «ISIS» en su vaso en lugar de su nombre, como acostumbra la franquicia. El hecho ocurrió recientemente en un establecimiento administrado por la cadena de grandes almacenes Target en Minesota, EE.UU.
Aishah, de 19 años, asegura que antes de terminar de decir su nombre al ordenar su café, vio que el barista ocultaba lo que escribía en el vaso. «Cuando recibí la bebida, me dejó en choque que en estos días y esta época se pudiera escribir algo así», comentó la joven a medios locales, en relación a que se asocie a la organización terrorista Estado Islámico con cualquier persona de fe musulmana.
Al preguntar al empleado sobre lo que había escrito, él le aseguró que no había escuchado correctamente su nombre. Aishah solicitó entonces hablar con el gerente del local, pero este habría defendido la versión del trabajador.
«Me sentí humillada, me sentí furiosa», agregó la joven, que ese día llevaba hiyab. El incidente llegó hasta el Consejo de Relaciones Estadounidenses-Islámicas (CAIR, por sus siglas en inglés), que hizo un llamado para que se despida al personal involucrado y se brinde capacitación adicional al equipo.
Por su parte, un portavoz de la cadena Target declaró que el empleado escuchó mal el nombre de Aishah y lamentó «la experiencia de esta clienta». Además aseguró que los responsables del establecimiento se disculparon «inmediatamente» con ella cuando recibieron la queja.
«Hemos investigado el asunto y creemos que no fue un acto deliberado, sino un error desafortunado que podría haberse evitado con más aclaraciones. Estamos tomando las medidas apropiadas con el miembro del equipo, incluida capacitación adicional, para garantizar que esto no vuelva a ocurrir», expresó el vocero.
Sin embargo, tanto la joven como el CAIR rechazan las explicaciones de la compañía y sostienen que no se trata de un «simple error», por lo que han presentado una denuncia ante el Departamento de Derechos Humanos de EE.UU.