El País/Patricia Peiró.- El adolescente de 16 años ha sido trasladado grave al hospital tras un posible ataque de bandas juveniles por el que ya hay un detenido.
Un menor de 16 años ha sido apuñalado al menos tres veces esta madrugada en el distrito de Carabanchel. El Samur le ha atendido en la atendido en el paseo Quince de Mayo, a pocos metros de la estación de metro de Marqués de Vadillo, pero por el momento se desconoce si la agesión se ha producido en ese punto o el chico iba huyendo y ha caído en ese punto. La principal hipótesis es la de un ajuste de cuentas entre bandas juveniles por la edad de la víctima y por la zona en la que se ha producido el ataque. La policía ha detenido a una persona por su posible implicación en el apuñalamiento.
Natividad Ramos, jefa de guardia del Samur, ha explicado que el chico estaba “agitado” a la llegada de los servicios de emergencia, y que presentaba “tres heridas de arma blanca”, dos en el pecho y una en la espalda. Los sanitarios han conseguido estabilizarle y le han trasladado sedado al hospital Doce de Octubre. La policía se ha hecho cargo de la investigación de esta agresión y ya en el momento de la atención sanitaria ha identificado a algunas personas que podrían haber sido testigos de los hechos. En el momento de la agresión todos los negocios del paseo estaban ya cerrados.
Carabanchel es uno de los distritos incluidos en el plan antibandas impulsado por las fuerzas de seguridad en la Comunidad de Madrid hace un año, tras una noche de varios apuñalamientos y dos asesinatos en Madrid que levantó la alerta sobre la agresividad creciente de estas organizaciones violentas. Según los últimos datos de la Delegación de Gobierno, en estos momentos hay 800 pandilleros en la Comunidad de Madrid.
Hace apenas dos semanas se produjo otra agresión prácticamente idéntica, con el mismo guion que siguen los ataques de bandas. Un chico fue perseguido por, al menos, otros dos que consiguieron darle caza en una plaza del distrito de Arganzuela. Los agresores le hirieron en la cabeza y en la mano, pero después la víctima de 16 años consiguió refugiarse en el negocio que regenta su padre y fue atendido por los servicios de emergencias.
Los ataques de bandas dejaron en 2022 cuatro muertos en Madrid, aunque prosigue la investigación de otros dos homicidios a final de año que también podrían ser obra de estos grupos juveniles. El último de ellos, el asesinato de William, un chico de 15 años que fue tiroteado en la plaza frente a su casa, en Villaverde, en diciembre. El otro es el de Sailen Hurtado, al que pegaron varios tiros a la salida de un concierto en una discoteca en Fuenlabrada el pasado noviembre.
