Su discurso es racista y carga contra Europa y la OTAN
REUTERS.- El líder de un partido de extrema derecha ha ganado este fin de semana las elecciones en la región eslovaca de Banska Bystrica, en el centro del país. Es el último político populista que ha logrado capitalizar la creciente frustración de los votantes por el elevado desempleo -es la segunda región con más paro del país- y la economía en decadencia de la zona.
Marian Kotleba, el líder del Partido Popular- Nuestra Eslovaquia (LSNS), ha sido elegido gobernador de la región con el 55,5% de los votos una segunda vuelta contra Vladimir Manka, del partido de gobierno.
Kotleba, de 36 años, ha sido acusado en varias ocasiones de difundir propaganda racista, pero ha salido absuelto o se ha desestimado la denuncia. También reclama recortes del gasto social en «parásitos» y por que se prime la comida producida en Eslovaquia frente a la carne de Irlanda y Polonia que contendría «agua y esteroides». Su partido exige que Eslovaquia se replantee la privatización de las empresas estratégicas, el abandono del euro y la salida de la OTAN, una organización que él considera http://espfarmacia.com/levitra/ «criminal».
«Todos hemos perdido», escribía hoy el principal periódico eslovaco, SME. «Las botas militares de la región de Bystrica resuenan en nuestras cabezas. Es un precio demasiado alto para romper con el dominio de Smer [el partido del Gobierno, socialdemócrata]».
Pese a su victoria, la influencia de Kotleba en la toma de decisiones de la región será limitada, ya que el partido del Gobierno del primer ministro Robert Fico, Smer, tiene mayoría. Controla seis de las ocho regiones del país.
El partido de Fico llegó al poder en 2012 con la promesa de apoyar al hombre de la calle. Su partido sigue siendo el más popular, con un 35% de apoyo, según una encuesta de la agencia Focus, frente al 2,2% del partido de Kotleba.
El paro y los problemas económicos se han aliado con el recelo ante la integración europea, el islam y el multiculturalismo para aupar la popularidad de los partidos de extrema derecha en toda Europa, desde Grecia a Francia a los países nórdicos.