El Periódico.- El encausado declara que su intención era participar en el debate de inmersión lingüística con un mensaje que animaba a la escuela un grupo «PSÑ», de «ñordo», para el alumno cuyos padres llevaron ante la justicia la discriminación del castellano.
Uno de los tuiteros imputados por el delito de odio por un tuit que se mofaba de la familia de Canet de Mar que impulsó la sentencia que obliga a impartir el 25% de las clases en castellano justifico este jueves ante el juez que lanzó en mensaje en la red social para participar en el debate sobre la inmersión lingüística en Catalunya y que lo hizo con «respeto», según fuentes judiciales. Otro encausado en la misma causa se acogió a su derecho a no declarar, aunque lo hará voluntariamente en un futuro después de que el día 12 de septiembre declaren como testigo los perjudicados. Ni la fiscalía, que presentó la denuncia contra cuatro tuiteros, ni las acusaciones personadas, como Vox, acudieron al interrogatorio. Las fuentes consultadas señalaron que el fiscal delegado estatal de delitos de odio, Fernando Rodríguez Rey, ha abierto una expediente de seguimiento sobre este proceso.
A Carlos R. M., que ha aludido en su interrogatorio al debate sobre la inmersión lingüística, la fiscalía le imputa haber publicado el 3 de diciembre del 2021 el siguiente mensaje: «Entonces cread el grupo PSÑ, poned al niño solo y le hacéis 50-50». Según la acusación pública, con este redactado el denunciado «hace un llamamiento a aislar al menor, pretendiendo que tenga un grupo escolar específico para él por las pretensiones lingüísticas de sus padres y al que le ponen la letra Ñ de ñoño con la que usualmente se puede insultar a los españoles». Y agrega: «además, hace un llamamiento a dejarle solo en el centro escolar». El imputado remarcó en su declaración judicial que en la misma red social se escribieron otras frases más impactantes sobre este asunto que no han tenido la misma repercusión penal.
Apuntar a la familia
El tuitero Jaume M. que se acogió a su derecho a no declarar está acusado de escribir tuits parecidos. En concreto, el mismo día, 3 de diciembre, publicó uno que rezaba: «Por favor, queremos saber el nombre y la dirección donde vive la familia». Después redactó: «Ya va siendo hora de saber quién es la familia que ha hecho la denuncia. Nombres y apellidos. Esto no les puede salir gratis». Los siguientes mensajes culpabilizaban a la familia de Canet de Mar y animaba a publicitar su nombre y amenazaba que si alguien hacía lo mismo «vivirá un auténtico infierno y habrá de marcharse del país». La fiscalía apunta: «Todos estos mensajes revelan una voluntad de apuntar expresamente a la familia afectada».
La defensa está estudiando la posibilidad de recusar al titular del Juzgado de Instrucción numero 12 de Barcelona, que instruye la causa, por no permitir que las declaraciones se efectúen directamente en catalán y al considerar que un togado de estas característica no es el idóneo para tramitar este proceso. Los otros dos acusados por tuits similares declararán el próximo lunes. Uno de ellos ha pedido ser interrogado en catalán a través de un traductor.