ABC.- Una docena de personas, al parecer miembros de Boixos Nois (ultras del Barcelona), han atacado este domingo un restaurante frecuentado por seguidores del Espanyol (que esta tarde juega su partido de Liga ante la Real Sociedad) y por integrantes de las Brigadas Blanquiazules, provocando heridas a un joven que ha tenido que ser trasladado a un hospital. El ataque podría ser la venganza al asalto que el pasado martes sufrió el bar en el que se reúnen los ultras azulgranas antes del partido de la Champions ante el Benfica, ataque en el que habrían participado seguidores portugueses con la ayuda de algunos radicales del Espanyol.
Según informa lacronicadeportiva.com, el ataque ha tenido lugar en el bar Los Cazadores, frecuentado habitualmente por miembros de las Brigadas Blanquiazules, cuando una docena de miembros de Boixos Nois, armados con martillos y porras, han bajado de tres coches y han entrado en el establecimiento, provocando importantes destrozos.
Un joven de 18 años que estaba en el interior ha resultado herido y ha tenido que se trasladado a un hospital, mientras que una chica también ha resultado herida al caerle encima la máquina de tabaco. Según varios testigos, los atacantes han entrado al local gritando «somos los Boixos Nois hijos de puta».
El pasado martes, un grupo de unos 40 encapuchados, seguidores del Benfica, atacaron el bar El Sabroso de Barcelona, un establecimiento situado a escasos metros del Camp Nou y frecuentado habitualmente por hinchas radicales del Barça. Los ultras lusos, que lanzaron mesas, sillas y bengalas al interior del local, podrían haber contado con la ayuda de radicales del Espanyol, lo que apunta a que el ataque de este domingo podría tratarse de una venganza.
Hay que recordar que esta misma semana la Policía Nacional ha desarticulado a la cúpula de los Boixos Nois. Catorce miembros fueron detenidos en una operación que se inició el pasado 2 de noviembre. El operativo estuvo dirigido por el Juzgado número 1 de Sabadell y los acusados fueron imputados por delitos graves por tráfico de droga, explotación sexual de mujeres, tenencia ilícita de armas y blanqueo de capitales. Los agentes incautaron diez armas de fuego, además de numerosas armas blancas y varias sustancias ilegales como 5.000 plantas de marihuana y 42 kilos de cogollos tras un registro en un total de 18 viviendas y locales. Un total de siete miembros de la organización ya ingresaron en prisión. Además, se ha bloqueado más de 20 cuentas bancarias, y se embargaron tres viviendas y 27 vehículos, ya que se cree que forman parte de actividades ilícitas que han realizado la organización durante todo este tiempo.
Los Boixos Nois, que fueron fundados en 1981, no puede entrar en el Camp Nou desde que Joan Laporta ganara las elecciones en 2003 e iniciara una cruzada contra el club radical, lo que le ha costado al presidente numerosas amenazas y pintadas en su domicilio habitual. La última acción violenta de esta organización delictiva había sido el pasado 25 de enero 2020 en Valencia, cuando protagonizaron unos graves enfrentamientos contra el grupo ultra Yomus. Ahora han regresado en Cornellá.