TRIBUNA DE SALAMANCA. JAVIER RÚIZ-AYÚCAR.- J.S., estudiante abulense en Lyon gracias a una beca Erasmus, recibió un botellazo en la cara al salir de un vagón de metro en la ciudad gala al grito de «¡Estamos en Francia, habla francés, hijo de puta!».
Un estudiante abulense de 21 años vivió el pasado miércoles en sus propias carnes un episodio de violencia racista similar al que hace un mes escandalizó a todo el país, cuando un español fue agredido en el Reino Unido con un tablón de madera por hablar español.
Todo ocurrió pasada la media noche del pasado 30 de noviembre cuando J.S., residente en la ciudad francesa de Lyon, donde estudia gracias a una beca Erasmus, salía de un vagón de metro en la estación de Saxe Gambetta, al noroeste de la tercera ciudad más poblada de Francia, tras un trayecto en el que había intercambiado mensajes de voz, en español, a través del teléfono móvil.
Uno de los pasajeros, de origen magrebí, le dijo algo al salir por la puerta y cuando el joven se giró, este pasajero le estampó en la cara un botellín de cristal al grito de «c’est la France, parle en français fils de pute!» («¡Estamos en Francia, habla francés hijo de perra!«).
Así lo cuenta en su perfil de Facebook y así lo ha relatado a este periódico el joven, que había regresado a la ciudad francesa hacía solo unos pocos días tras una estancia en Ávila, y que asegura que se quedó en shock mientras las puertas del vagón se cerraban y el tren se marchaba con su agresor dentro.
No se trató de un golpe fuerte, señala J.S., al que le ha quedado una herida superficial producida por las aristas del culo del botellín, pero el tinte xenófobo del ataque fue el que le impulsó a acudir a la comisaría más cercana para denunciarlo.
Un racismo que, según asegura nuestro protagonista, no había visto antes en los casi tres meses que lleva en Francia, a pesar de vivir en un barrio de mayoría musulmana.