La Razón.- «Quemar judíos». Este era el objetivo de un peligroso sujeto antisemita que intentó incendiar una pizzería ubicada en el centro de Madrid. Su plan inicial era quemar la mayor sinagoga de la capital pero cuando fue se encontraba cerrada, según aseguran fuentes de la investigación a LA RAZÓN. La Policía Nacional ha conseguido detener a este individuo que estaba profundamente radicalizado por su consumo de propaganda de Hamás.
El plan de este individuo comenzó hace meses. Un estudiante de Filosofía que no tenía antecedentes de madre ucraniana y padre marroquí. El autoconsumo de propaganda propalestina y de Hamás provocó su autoadoctrinamiento paulatino.
Esta rabia hacia la comunidad judía se fue incrementando hasta que su único objetivo en la vida era preparar un ataque «minucioso y preconcebido» contra la comunidad israelí en España. El punto de mira lo tenía claro: la mayor sinagoga de la capital ubicada en el número 3 de la calle Balmes.
Desde Murcia, que era su punto de residencia, había programado una acción de «entrada y salida». Por ello decidió subir dos días antes de su preparado ataque. Para ello, había alquilado un piso y viajó a la capital sin dispositivos móviles.
Su objetivo: «Quemar judíos»
Este sujeto tenía todo preparado pero cuando llegó a la sinagoga se la encontró cerrada. En el camino de vuelta al piso que había alquilado se encontró con el Restaurante Rimmon Kosher, en el distrito de Santa Engracia. El joven, que tan solo tiene 23 años, se percató de que uno de clientes portaba una kipá.
En ese momento decidió actuar de forma impulsiva, la noche del pasado 4 de marzo. La rápida acción de los camareros que salieron en su busca evitó lo que podría haber sido una tragedia. En el momento del ataque había en su interior cerca de una decena de personas. Su objetivo era «quemar judíos».