Entre 15 y 20 personas, custodiadas por varios agentes de la Guardia Civil, exhiben banderas españolas y corean consignas contra el independentismo catalán.
PÚBLICO.- Con una gran pancarta en la que se podía leer España no se rinde, banderas rojigualdas y coreando consignas como «¡No nos engañan, Cataluña es España!» o «¡Puigdemont, a prisión!», un pequeño grupo de ultras —entre 15 y 20 personas— del grupo neonazi Hogar Social han irrumpido en el acto que ERC ha celebrado este martes delante de la prisión de Estremera, donde permanece encarcelado su candidato para el 21-D, Oriol Junqueras.
En el acto de ERC estuvieron presentes los principales dirigentes de la formación independentista: Marta Rovira, número dos de ERC por Barcelona y la llamada a ocupar la presidencia de la Generalitat si finalmente gana su partido y Oriol Junqueras sigue en prisión; el diputado en el Congreso, Joan Tardà; también estaba Raül Romeva, conseller cesado tras la aplicación del artículo 155, y que pasó 32 días en esa misma prisión de Estremera, así la presidenta del Parlament, Carme Forcadell.
Los ultras, vigilados por varios Guardias Civiles, hicieron acto presencia justo cuando empezaban las declaraciones de los dirigentes republicanos (Marta Rovira, Raül Romeva, Ernest Maragall y Toni Castellà). Los agentes evitaron que los ultras se colocaran cerca y justo detrás de los dirigentes, a los que profirieron gritos e insultos para tratar de que no se oyeran sus palabras, pero finalmente el acto se celebró, aunque con dificultades.
A la conclusión del acto, los dirigentes independentistas abandonaron el lugar en un autobús.