Diecinueve empleados de la compañía han presentado una demanda alegando que la empresa no tomó medidas para evitar que los discriminaran
EUROPA PRESS. LA VANGUARDIA.- Diecinueve trabajadores de UPS han demandado a la empresa de paquetería alegando que sufrieron discriminación racista continua y que la compañía no hizo nada para detenerlo. Los gerentes y supervisores permitieron e incluso alentaron el odio en el centro de distribución en Maumee, en Ohio (Estados Unidos), según la demanda presentada el miércoles por la tarde en el Tribunal del condado de Lucas en Ohio.
Los trabajadores afirman en su denuncia que, entre otras cosas, usaban con frecuencia «nigga», una palabra que se considera ofensiva y despectiva hacia las personas negras, o colocaban un muñeco de un mono vestido como un empleado de la empresa.
Los trabajadores, muchos de los cuales llevan en la compañía más de dos décadas, argumentan que los comentarios racistas provocaron reacciones que iban desde «miedo, ira y disgusto hasta consternación» por la falta de acción de la empresa.
«UPS investigó con brevedad los hechos y tomó medidas disciplinarias rápidas contra aquellos que se descubrió que habían participado en acciones inapropiadas, incluido el despido de dos empleados», dijo a CNN el director de relaciones corporativas con los medios de la compañía a CNN cuando se le pidió una reacción a la demanda.
Este representante dijo que, desde entonces, la compañía ha impuesto medidas para garantizar que los empleados estén bien y también ha supervisado sus operaciones para garantizar un entorno positivo y libre de acoso. «La compañía tiene políticas estrictas contra el acoso y la discriminación», dijo. «Cuando se reporta un incidente, UPS toma el asunto en serio, investiga a fondo y toma las medidas disciplinarias apropiadas contra los responsables de la mala conducta».
Un trabajador dice que, en un chat grupal de varios trabajadores se lanzaron mensajes «de carácter racial» y «ofensivo», lo que hizo que muchos de ellos estallaran. Sus abogados dicen que este incidente fue reportado a los encargados, pero no se tomaron medidas disciplinarias.