Además, el partido antieuro Alternativa para Alemania (AfD) se estrenará en un Parlamento regional
ÚRSULA MORENO. LA VOZ DE GALICIA.- Los sajones votan hoy y nadie duda de que la CDU de Angela Merkel arrasará nuevamente en las urnas, con un 40 % de porcentaje, el mismo de hace cinco años en este Land del este de Alemania. Pero son dos incógnitas las que mantienen en vilo a los analistas: ¿qué socio de gobierno buscarán los democristianos cuando sus aliados tradicionales, los liberales del FDP, probablemente no logren el 5 % necesario para entrar en el Parlamento regional? ¿volverán a entrar los neonazis del NPD, consolidando ya por tercer mandato consecutivo su presencia en Sajonia?
Lo que no es una incógnita es que el partido antieuro Alternativa para Alemania (AfD) se estrenará en un Parlamento regional, el de Dresde, después de haber rozado el umbral del 5 % hace un año en las elecciones generales y haber conseguido escaños en la Eurocámara. Los euroescépticos de AfD cuentan con un 7 % de la intención de voto, así que muy mal tendrían que ir las cosas para que no logren algún escaño. Más difícil será que gobiernen, ya que el partido de Merkel ha garantizado que no formará alianzas con ellos en ninguno de los tres comicios regionales que se celebran entre agosto y septiembre.
El xenófobo y populista NPD hace campaña con el miedo. «El dinero para las abuelas, y no para los gitanos», rezan algunos de los carteles que tapizan estos días Sajonia y Brandeburgo. Aunque a nivel nacional es un partido marginal, este año parecía que fueran a volar de la Cámara sajona hasta que lograron invertir los pronósticos gracias a una eficaz campaña de buzoneo propagando el miedo a una eventual participación alemana en las guerras de Irak y Siria y el consecuente aluvión de refugiados. En este estado el porcentaje de residentes extranjeros es mínimo, apenas supera el 2 %. El NPD sería un partido en vías de extinción, entre otras cosas por sus problemas económicos, si no fuera por su presencia en dos regiones alemanas, Mecklemburgo-Antepomerania y Sajonia.
El bastión de los extremos
El este de Alemania sigue siendo el bastión de los extremos políticos. La segunda fuerza más votada es la Izquierda, con un 20 % de la intención de voto, aspira a mejorar su posición, pero no tiene perspectivas de entrar a gobernar con la CDU de Stalisnav Tillich, el ahora jefe de gobierno que presume de potenciar la innovación tecnológica de Sajonia. Si la votación fuera directa, Tillich no tendría nada que temer, ya que un 57 % de los sajones lo consideran el más capacitado. Ahora bien, la pregunta es ¿quién será finalmente su pareja de baile durante los próximos cinco años?
