El Periódico.- El Embajador Moro de 2020 por una comparsa de la localidad alicantina había advertido de que el «boato» iba a ser «especial» este año.
La Entrada Mora de las fiestas patronales que vivió este domingo la localidad alicantina de Orihuela, tras dos años de pandemia, estuvo marcada por la polémica en la calle y en las redes sociales. El Embajador Moro por la comparsa Moros Musulmanes Escorpiones ya había advertido de que el «boato» iba a ser «especial» este año pero lo que nadie se imaginaba es que se convirtiera en el protagonista de la escena más polémica de las celebraciones.
La entrada mora estuvo engalanada con exhibición de caballos, actuaciones de bailarines, carrozas que precedían al escorpión y en las que iban familiares y amigos de los participantes en la entrada. Sin embargo, lo que llamó la atención de todos fue que al empresario local lo portaban un total de 48 personas de origen subsahariano.
La reacción de los oriolanos en las redes no se ha hecho esperar y han sido muchas las críticas que ha recibido la entrada de la comparsa Moros Musulmanes Escorpiones al considerarlo un hecho racista y con tintes xenófobos.
Discusión en el desfile
Un grupo de los 48 participantes comenzaron a discutir en mitad del desfile de la Entrada Mora de Orihuela e incluso uno de ellos, en un momento de tensión, le propinó una patada a otro.
Una multitudinaria entrada
A los Moros Musulmanes Escorpiones, en los que este año ha recaído la Embajada Mora, le han seguido el resto de comparsas del bando moro en este orden: Moros Almohábenos, Negros Egipcios, Moros J’Alhamed, Moros Abdelazíes, Moros Realistas, Beduina Moros Muladíes, Beduina Moros Bedawies, Moros Almorávides, Moros Viejos de Abez Mohor, Moros Nazaríes de Abén-Humaya. La Armengola, Elisa Gil, ha estado escoltada por los componentes de su fila Kalahari y los de Ashanti.
