La brutal agresión se produjo el 21 de noviembre de 2016 en un bar de Reyes Católicos, en las horas previas a partido enter el equipo sevillista y la Juventus
JESÚS DÍAZ. ABC.- La Fiscalía de Sevilla solicita tres años y nueve meses de cárcel para seis miembros de los Biris, «grupo ultra del Sevilla Fútbol Club», por el brutal ataque hacia aficionados italiano de la Juventus de Turín en un bar de la avenida Reyes Católicos la noche del 21 de noviembre de 2016, en las horas previas a un partido entre ambos equipos en la capital.
Por aquellos hechos, según informó en su día la Policía Nacional, fueron detenidos hasta catorce aficionados radicales del Sevilla FC, pero finalmente el juicio en la Audiencia de Sevilla se celebrará contra seis de ellos: A.F.C.S.; J.C.V.G.; A.M.G.; A.M.G.; A.L.D.; y A.M.O.R.
La Fiscalía expone en su escrito de acusación provisional, al que ha tenido acceso este periódico, que estos seis individuos, pertenecientes al «grupo ultra sevillista», como define a la peña Biris, sabían que multitud de aficionados italianos estaban presentes en la ciudad con motivo de la celebración del partido entre el Sevilla FC y la Juventus de la Liga de Campeones.
De manera que se desconoce los seis acusados tuvieron noticia de que varios aficionados de la Juventus habían quedado con aficionados del Real Betis Balompié para cenar ese día 21 de noviembre en la taberna «El Papelón», en Reyes Católicos.
«Con la intención de iniciar una pelea con los aficionados rivales, y con el más absoluto desprecio a la paz social y a la integridad física de sus semenajtes, los acusados, junto a otros jóvenes no identificados, que sumaban un total de veinte personas, se dirigieron al bar portando capuchas, bragas y pasamontañas, para evitar ser reconocidos. Además, llevaban objetos potencialmente peligrosos como botellas, palos y navajas», explica el Ministerio Público.
Al llegar al bar, comenaron a lanzar objetos a los aficionados rivales, al grito de «Biris y Sevilla hooligans». Tampoco dudaron en usar las sillas o mesas del local para arrojarlas a las víctimas. Esto provocó que todas las personas que se encontraban en el establecimeinto tuvieran que parapetarse para evitar ser golpeados.
Un navajazo sin autor conocido
Tras este primer ataque, los radicales sevillistas simularon retirarse con el fin de que los ocupantes del bar creyeran que podían abandonarlo con seguridad. En ese momento, realizaron un nuevo ataque. Lanzaron más objetos, según la Fiscalía.
En medio del caos generado, «uno de los participantes en la pelea sacó una navaja y agredió a uno de los aficionados italianos, quien cayó al suelo gravemente herido», precisa la Fiscalía. Este herido requirió de intervención quirúrgica. No ha podido determinarse quién fue el autor del navajazo.
Otros tres italianos sufrieron lesiones por los objetos lanzados contra ellos. Tampoco se ha podido reconocer a los autores concretos de estos lanzamientos.
Las personas que se encontraban en el bar y en sus aledaños quedaron atemorizados, teniendo que ocultarse en locales próximos o en sus domicilios, hasta que hicieron acto de presencia las dotaciones policiales. Entonces, los atacantes huyeron del lugar.
Los hechos provocaron numerosos desperfectos en el bar, tasados por encima de los 1.600 euros. Según la Fiscalía, estos hechos constituyen un delito de riña tumultuaria y otro de desórdenes públicos, por los que solicita para los seis acusados tres años y nueve meses de cárcel y el pago de una multa de 21 meses a razón de diez euros diarios. El juicio se tenía que haber celebrado este mes en la Audiencia pero fue suspendido a la espera de nueva fecha.