20Minutos.- El agresor le arrancó al padre un trozo de dedo de un mordisco y le propinó varios golpes en la cabeza al niño.
La Fiscalía pide siete años y cuatro meses de cárcel para un hombre acusado de agredir a otro, al que arrancó un trozo de dedo de un mordisco, y a su hijo menor, al tiempo que les dirigía insultos racistas por su origen marroquí.
La sección séptima de la Audiencia de Barcelona ha dejado este miércoles visto para sentencia el juicio contra el presunto agresor xenófobo, un hombre que acumula varios antecedentes por delitos de lesiones y que este miércoles se ha acogido a su derecho a no declarar.
La Fiscalía acusa al procesado de dos delitos de lesiones, en uno de los casos por deformidad debido a que nunca se pudo reconstruir la falange arrancada a la víctima, y pide que se le condene a indemnizar a las víctimas con cerca de 14.000 euros por los daños físicos y morales causados.
Según mantiene el ministerio público en su escrito, el acusado se cruzó con las víctimas cuando salían de una peluquería de Badalona (Barcelona) y, sin que mediara palabra alguna entre ellos, les espetó «me cago en tus muertos, moro de mierda, vete a tu país», con voluntad de «humillarlos».
Como las víctimas le recriminaron su actitud, el acusado se dirigió a ellos y propinó varios puñetazos al padre, al tiempo que le mordía en un dedo hasta seccionarle la falange, así como varios golpes en la cabeza al hijo.
El procesado salió huyendo pero las víctimas corrieron tras él hasta que lograron retenerlo a la espera de que llegara la Guardia Urbana para detenerlo.
El relato de la Fiscalía lo ha corroborado ante el tribunal el menor atacado, quien ha declarado protegido por una mampara para impedir su confrontación visual con el acusado.
