Asociaciones y activistas LGTB piden que se haga justicia y se detenga a los responsables de la tortura y posterior asesinato de Joel Molero, un joven de 19 años víctima de un crimen de odio. La policía busca a dos sospechosos.
CARLA GÓMEZ. CÁSCARA AMARGA.- El terrible asesinato de Joel Molero, de 19 años, en la localidad peruana de Chachapoyas ha generado la protesta del colectivo LGTB y varios activistas por los derechos humanos. El joven gay fue asesinado cuando salía de una discoteca y posteriormente mutilado y quemado.
A su funeral acudieron alrededor de 200 personas que condenaron el crimen y exigieron a las autoridades que se haga justicia para Joel.
La policía busca a dos sospechosos. El primero se encontraba con el fallecido la noche de su muerte y el segundo fue quien prestó la habitación donde se cometió el asesinato.
El director del MHOL (Movimiento Homosexual de Lima), ha manifestado que cada semana muere una persona asesinada fruto de la violencia homófoba en Perú. «Hace muy pocos meses el Congreso aprobó aumentar en un tercio la pena a los crímenes motivados en la intolerancia pero con 78 votos decidió no explicitar que se sancionaba también la intolerancia homofóbica: esos congresistas y el Gobierno son responsables también de esta terrible muerte», denunció.