ABC.- Los Juegos Olímpicos acaparan estos días la atención de los aficionados, pero las competiciones en algunos deportes ya están en marcha, como las eliminatorias previas de la Champions League, en las que hoy se enfrentan el Dinamo Zagreb y el Legia de Varsovia, equipos que cuentan con dos de las hinchadas más violentas de Europa. La noche del martes volvió a comprobarse en las calles de la capital croata, donde cientos de ultras locales sembraron el pánico y se enfrentaron con aficionados rivales.
Armados con palos y otros objetos contundentes, numerosos radicales del Dinamo fueron ayer a la ‘caza’ de ultras polacos desplazados para presenciar el partido de esta noche. Varias personas que disfrutaban del ambiente de los locales nocturnos de Zagreb grabaron el ataque de los hinchas croatas, que apenas de palos emplearon también numerosas bengalas.
Los ultras del fútbol no se han contagiado, ni mucho menos, del espíritu deportivo que reina estos días en los Juegos Olímpicos y la violencia también hizo acto de aparición en el duelo de la liga colombiana entre Independiente Santa Fe y Atlético Nacional, donde también se vieron unas lamentables imágenes.
El regreso del público a los estadios de Colombia después de más de un año de ausencia por la pandemia se vio empañado por la violencia de los ‘barrabravas’, que en el descanso invadieron el terreno de estadio El Campín de Bogotá, donde se desató una pelea entre radicales, que también se enfrentaron en las gradas. Incidentes que provocaron dos dejaron dos heridos graves. Los disturbios retrasaron por cerca de una hora el inicio de la segunda mitad del partido.
