JALED ABU TOAMEH. LIBERTAD DIGITAL.- Una visita de estudiantes palestinos a campos de la muerte nazis ha suscitado controversia entre los palestinos, algunos de los cuales han criticado la visita, considerándola una forma de normalización con Israel.
Unos treinta estudiantes palestinos de las universidades Al Quds y Bir Zeit de la Margen Occidental acudieron la semana pasada a Auschwitz-Birkenau para aprender acerca delHolocausto.
La visita estaba dirigida por Mohamed Dayani, profesor de Estudios Americanos en la Universidad Al Quds, y que encabeza también el movimiento islámico moderado Wasatia.
La visita a los campos nazis ha indignado a algunos palestinos, lo que ha hecho que la Universidad Al Quds se distancie del viaje. La institución académica y su presidente saliente, Sari Nuseibeh, han sido criticados por promover la normalización con Israel.
En una declaración, la universidad ha anunciado que no tiene nada que ver con la visita a Auschwitz-Birkenau. Ha afirmado que se trata de una visita privada del profesor Dayani y de los estudiantes. «No representan a la universidad», proclamaba la declaración. «El profesor Dayani está de permiso y no había sido encargado por la Universidad [para organizar la visita]».
La Universidad Al Quds prosigue la declaración haciendo hincapié en el hecho de que sigue comprometida con la decisión, adoptada en 2009 por su administración, de cortar cualquier lazo con universidades israelíes.
Los estudiantes palestinos viajaron a los campos de la muerte nazis como parte de un programa conjunto,»Reconciliación y Resolución de Conflictos», con la Universidad Friedrich Schiller de Jena (Alemania) y la Universidad Ben Gurión del Neguev.
En cuanto los activistas antinormalización se enteraron de la visita, lanzaron un feroz ataque en los medios sociales contra el profesor y los estudiantes.
«No entiendo como los estudiantes [palestinos] aceptan la normalización [con Israel]», escribía un periodista palestino de Ramala en su página de Facebook. «Este profesor es el rey de reyes de la normalización».
El principal diario palestino, Al Quds, que informó de la controvertida visita, suscitó un debate entre sus lectores acerca de la eficacia de viajes como éste.
El periódico tuvo que borrar posteriormente algunas respuestas de los lectores, en las que se acusaba al profesor de traición y colaboracionismo.
Un lector comentó:
La visita debería considerarse en el contexto de los intentos de desechar la historia y la cultura palestinas. Grupos occidentales sospechosos creen que hay que cambiar la mentalidad de los palestinos, no mediante la política, sino lavando el cerebro de generaciones y enseñándoles mentiras e invenciones enormes, como el Holocausto y el sufrimiento de los judíos, para que acepten así el robo de su tierra.
Otro lector destacaba:
Nuestra enemistad no es hacia los judíos, y nadie nos puede acusar de antisemitismo. Nuestra enemistad es hacia los sionistas que usurparon nuestra tierra. Pero, ¿puede alguien negar que los sionistas aprovechan lo que les sucedió a los judíos en Alemania y en otros lugares para justificar lo que hicieron en Palestina y para suscitar las simpatías mundiales? Al final, algunos de nosotros nos hemos unido al coro de plañideras.
Pero también hay buenas noticias. Varios lectores salieron en defensa del profesor Dayani y de los estudiantes que visitaron los campos nazis para aprender acerca del Holocausto.
En respuesta a las críticas, un lector escribió: «Francamente, estas respuestas son teatrales. Unos estudiantes fueron de viaje y eso es todo. No hay necesidad de politizar una insignificante visita».
Otro lector, que manifestaba su apoyo a la visita, decía:
Lo hemos politizado todo, salvo la malversación de fondos públicos. ¿Así que está bien robar millones de dólares a la gente, pero no un viaje de estudios académicos?
El columnista palestino Abdulá Dweikat lamentaba la visita e instaba al mundo académico palestino a detener la «peregrinación» a los campos de la muerte nazis. «Me dolió la visita de estudiantes universitarios palestinos a Auschwitz-Birkenau», escribía. “Sí, somos seres humanos que rechazan el genocidio. Pero nuestra humanidad rechaza cualquier intento de ignorar el sufrimiento de nuestro pueblo, masacrado diariamente a manos de los ocupantes. ¿No habría sido mejor que nuestros profesores y estudiantes hubieran visitado el campamento de refugiados de Yarmuk [en Siria] o los campamentos del Líbano, para ver el verdadero sufrimiento?»
La Autoridad Palestina ni ha respaldado ni se ha opuesto a la visita a los campos de exterminio nazis. Es evidente que la dirección de la AP teme mezclarse en la controversia suscitada por la misma.
Por otra parte, Hamás ha manifestado su enérgica oposición a las enseñanzas sobre el Holocausto en las escuelas de la Franja de Gaza administradas por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA, por sus siglas en inglés). El movimiento islamista afirma que enseñar el Holocausto es un «crimen contra los palestinos».
Queda por ver si el profesor Dayani y sus alumnos son castigados a su regreso a la Margen Occidental por atreverse a simpatizar con el padecimiento de los judíos.