La Tribuna de Toledo.- El alcalde del municipio jareño denunció ayer a este diario la existencia de nuevas pintadas ofensivas dirigidas contra el feminismo y el colectivo LGTBI.
El alcalde de La Estrella, Alfonso Caja, ha denunciado un nuevo acto vandálico registrado en el municipio que ha vuelto a tener como objetivo los murales feministas que se pintaron el pasado año de la mano de unos jóvenes de la localidad con mensajes feministas y a favor de la integración. Ya en las pasadas Navidades un acto vandálico destrozó este trabajo realizado sobre los muros del polideportivo, lo que llevó al alcalde a emitir un bando en el que criticaba esta «muestra de su sinrazón e incultura» a los autores de este acto, al deteriorar y manchar «los murales, que con gran ilusión y esfuerzo, incluso económico, elaboró nuestra juventud».
Este lunes, el alcalde conocía que estos murales habían vuelto a ser el blanco del ataque de los vándalos, quienes han tachado parte de los mensajes feministas que rezan, además de añadir insultos y descalificaciones como ‘putas feminazis’ y ‘misándricas’, que se suman a los que ya escribieron el pasado diciembre como ‘degeneración’.
En otro de los murales, decorado con una bandera multicolor, símbolo del colectivo LGTBI, se han tachado las imágenes de dos parejas homosexuales y la palabra orgullo que figura bajo una de ellas, y se ha escrito, entre otros mensajes, ‘Fuera basura’.
Caja señaló que, desde los daños causados el pasado diciembre en estas mismas pinturas, no se habían vuelto a detectar incidentes de este tipo en el municipio. Se estima que esta vez se han llevado a cabo entre la Semana Santa y este fin de semana, aunque se desconoce con exactitud puesto que es una zona fuera de la localidad con apenas viviendas.
Se da la circunstancia que, además de estos ataques, en el pasado se han registrado otros también en el propio Ayuntamiento de la localidad, así como en mobiliario urbano, con el destrozos en señales de tráfico, en la piscina y en el alumbrado de la iglesia.
Se suman los realizados contra la vivienda del propio alcalde, el último de ellos el pasado enero cuando le colocaron petardos en su ventana. Precisamente, como ya informó La Tribuna, uno de estos ataques se produjo a raíz del bando en el que denunciaba las pintadas en los murales feministas. Entonces, se encontró una serie de objetos y basura apilados ante su vivienda de tal manera que, de no haber sido avisado de antemano, podrían haberse caído sobre él o su pareja al salir del domicilio. No fue el primer acto vandálico del que ha sido objeto Caja, quien confirmó que los viene sufriendo desde su llegada a la Alcaldía hace ya casi tres años, algo que, para Caja, responde tanto a su condición de alcalde como a su orientación sexual. Si bien se han presentado denuncias por estos actos, no han sido suficiente para parar a sus autores.