elnacional.cat.- Mari Giner, miembro del grupo musical valenciano Carraixet, ha denunciado a través de Facebook la discriminación lingüística que ha sufrido Peñíscola (Bajo Maestrazgo). El incidente, según ha explicado en un video que ella misma ha colgado a las redes, se produjo en el restaurante Più Buono del municipio cuando el camarero le exigió que se le dirigiera en castellano. «Eso es espanya, yo soy español y a mí me hablas en castellano«, le lanzó el camarero. Giner, lejos de encogerse, le contestó que «el valenciano es mi lengua y la lengua oficial». A continuación, afirma Giner, el camarero «la mandó a la mierda». Entonces, Giner solicitó la hoja de reclamaciones, pero desde el restaurante le respondieron que no le podían dar porque no había consumido en el restaurante. Y, cuando quiso llevar a cabo la reclamación, le dijeron que tenían reservado el derecho de admisión y le denegaron la entrada en el local. En el video, se puede ver como Giner se encuentra afectada por la discriminación. No obstante, la cantante valenciana ya ha recibido muestras de apoyo y ánimos en las redes sociales.
Crece la discriminación lingüística
Más allá de los discursos contra la escuela en catalán y la presencia de la lengua catalana en las plataformas audiovisuales, el informe de quejas lingüísticas del 2020 realizado por Plataforma per la Llengua también es preocupante. I es que los datos que expone la organización son alarmantes. El catalán se encuentra en estado crítico y los ataques contra la lengua no paran de crecer. Así pues, el documento manifiesta que el año 2020 las quejas lingüísticas aumentaron un 80% con respecto al 2019.
El año 2020 se recogieron 1.303 quejas, mientras que el año anterior fueron 725. Es una diferencia sustancial, pero que la entidad pone en su contexto. Plataforma per la Llengua expone, por una parte, que se trata un crecimiento que se reproduce año tras año, siempre en aumento. Por ejemplo, en noviembre del 2021, las quejas del año ya superan las 1.500 y, por lo tanto, ya ha quedado atrás el récord del 2020.
Según las diversas quejas lingüísticas recogidas, Plataforma per la Llengua destaca que dos de cada tres tienen que ver con el incumplimiento de la normativa vigente. Es decir, la mayoría de quejas son por|para hechos o situaciones específicamente recogidas en el ordenamiento jurídico. De las 1.303 quejas reportadas el año 2020, 865 hacían referencia a vulneraciones de las regulaciones lingüísticas. La entidad expone que estas situaciones son debidas a «las inercias que genera un marco legal que, a pesar de los matices y los espacios de tolerancia, es en esencia supremacista y favorece el grupo lingüístico castellanohablante mientras relega los otros».