Un informe de la ONG Movimiento contra la Intolerancia indica que el año pasado hubo 19 casos en la Región relacionados con el racismo, xenofobia, homofobia y otras formas de intolerancia
EFE.- Murcia fue en 2015 la séptima comunidad autónoma española con mayor número de casos relacionados con delitos de odio, 19, según la Oficina de Solidaridad del Movimiento contra la Intolerancia, que asistió el año pasado un 25 % más de ellos en toda España con relación a 2014.
No obstante, en su informe Raxen especifica que no es que hayan aumentado en esa proporción esos delitos, sino que hay mayor conciencia en denunciar.
En el documento Raxen 2015, en el que recoge hechos de racismo, xenofobia, antisemitismo, islamofobia, antigitanismo, homofobia y otras formas de intolerancia, esta ONG ha detallado que asistió a 239 casos relacionados con delitos de odio mientras que en 2014 la cifra fue de 191.
Un delito o crimen de odio es «toda infracción penal dirigida contra una persona o un grupo de personas, a sus bienes, a causa de la intolerancia del autor hacia la raza, el origen étnico, la religión, la ideología, la orientación sexual u otra característica de la persona o del grupo», ha recordado en Movimiento contra la Intolerancia hoy, Día Mundial contra el Racismo.
El informe Raxen, que es anual y toma como fuente las noticias aparecidas en los medios, los casos asistidos por su Oficina de Solidaridad y otros registros, ha recogido el pasado año un total de 452 incidentes y delitos de odio.
Ese dato «solo representa el 11,3 % de la realidad estimada por Movimiento contra la Intolerancia, que alcanza los 4.000 incidentes y delitos de odio» al año, ha resaltado.
Cataluña es la comunidad autónoma con mayor número de esos delitos registrados en el último informe Raxen (90), seguida por la Comunidad Valenciana (76), Madrid (63), Andalucía (48), Castilla-León (43), Baleares (21), Murcia (19), Aragón (17) y resto de comunidades (75).
El presidente de Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, ha considerado que «la xenofobia y el rechazo a los refugiados e inmigrantes avanza en Europa y lo hace de la mano del crecimiento de la intolerancia al Islam y a los musulmanes».
Y «más aún tras los atentados de Charli Hebdo, Dinamarca o París», donde «un ambiente de horror posibilitó a reacciones y manipulaciones orientadas a la expansión del odio y el rechazo a los musulmanes», según Ibarra.
Ha comentado que aunque en España no existe una formación política que proyecte institucionalmente el racismo y la xenofobia, sí hay numerosos grupos racistas y neonazis «insertados en las gradas ultras de los campos de fútbol que son su vivero de reclutamiento, que adoctrinan en internet y protagonizan delitos de odio y difusión de la intolerancia».
Por todo ello, Ibarra ha pedido en un comunicado a las instituciones la creación de una Oficina Nacional contra los Delitos de Odio, aprobar las bases para un Plan de Acción Integral, aplicar la legislación en el fútbol, estimular las denuncias, cerrar las webs que promuevan el odio y concretar un apoyo efectivo a las víctimas.