EUROPA PRESS.- Un trabajador inmigrante han sido encontrado apuñalado este miércoles en un barrio de Moscú epicentro de disturbios racistas, en lo que un líder comunitario ha sugerido que era una venganza por el asesinato de un ruso la semana pasada que provocó las protestas.
El asesinato el jueves pasado de Yegor Shcherbakov en Biriuliovo, un barrio poblado por inmigrantes de las antiguas repúblicas soviéticas de Asia Central y el Cáucaso, provocó los peores disturbios racistas en la capital en tres años.
Antes de que un sospechoso de la muerte de Shcherbakov fuera detenido el martes, cientos de rusos se echaron a las calles del barrio persiguiendo a personas no eslavas cuya apariencia coincidía con la descripción hecha por la Policía del presunto asesino.
Una fuente policial ha dicho que el cuerpo de un ciudadano de Uzbekistán ha sido hallado en el distrito el miércoles, según la agencia de noticias Interfax.
«Hemos advertido a los inmigrantes de que tengan cuidado de la escoria nacionalista, y ahora el cuerpo de un uzbeco ha sido encontrado», ha señalado el presidente de la Federación de Inmigrantes de Rusia, Mujamad Amin Madzhumder.
La televisión estatal ha mostrado las imágenes del presunto asesino del joven ruso, un hombre de Azerbaiyán e identificado por la Policía como Orhan Zeynalov, mientras era detenido en la ciudad de Koloma este martes y trasladado en helicóptero a Moscú. En un vídeo publicado por la Policía, Zeynalov admite que ha apuñalado a Shcherbakov pero asegura que actuó en defensa propia.
En el tercer día de disturbios en Biriuliovo, la Policía detuvo a última hora del martes a cientos de jóvenes nacionalistas que se habían congregado para protestas contra el asesinato de Shcherbakov.