Movimiento contra la Intolerancia pide a la Delegación del Gobierno en Madrid que se detenga a los autores de un hecho que es considerado delito por el nuevo Código Penal
PEDRO BLASCO. VOZ PÓPULI.- A raíz de los carteles racistas que aparecieron en las calles de Madrid hace unos días, el presidente del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, aseguró este martes que “la xenofobia es un delito y hay que perseguirlo” e instó a la Delegación del Gobierno de Madrid a que persiga el delito de xenofobia que se ha cometido tras la pegada de los carteles. Ibarra también exige al Ayuntamiento de Madrid que limpie urgentemente todas las pintadas y carteles con símbolos nazis que se están colocando en las calles de la ciudad “y de los que desgraciadamente cada vez hay más”.
El presidente de esta asociación, que este martes asistió a la presentación del informe sobre los delitos de odio en España, explicó que el nuevo Código Penal incluye este tipo de actos como una acción delictiva, ya que promueven la xenofobia. Ibarra señaló que los carteles y mucha de la publicidad que hacen estas bandas transmite mensajes sutiles, pero que claramente inducen al odio al diferente, tal y como reflejaba un reciente trabajo Movimiento contra la Intolerancia, que descubrió un total de 1.200 páginas, blogs o perfiles de Facebook que incitaban a la violencia en la red e Internet; y en el que no se contabilizó Twitter.
Por otra parte, Ibarra se mostró satisfecho de la presentación que hizo el martes el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, sobre los incidentes relacionados con el odio en España, “algo que habíamos pedido varias veces”. El dossier recoge los delitos de odio por motivos racistas, antisemitas u otros referentes, religión o creencias, orientación sexual, enfermedad o discapacidad.
Delitos esclarecidos
El ministro del Interior informó que en 2014 se han esclarecido el 65,6% de un total de 1.285 delitos de odio registrados en España. De ellos, se han investigado y esclarecido 843 casos que terminaron con la detención o imputación de 512 personas. Estos casos se referían a ataques por orientación e identidad sexual, racismo y xenofobia, discapacidad, delitos contra las creencias y prácticas religiosas, antisemitismo y aporofobia (odio, miedo, repugnancia u hostilidad al pobre).
Según el informe, un total de 458 casos se produjeron en el interior de viviendas, seguido de la vía pública y otras vías de comunicación (365), los establecimientos de hostelería y ocio (163), los espacios abiertos (79), los campos de fútbol (40) y los centros religiosos (40). Por comunidades autónomas, destacan Andalucía, Cataluña, Comunitat Valenciana y País Vasco. En relación a las provincias: Madrid, Barcelona, Zaragoza, Valencia, Sevilla, Cádiz, A Coruña, Vizcaya, Guipúzcoa y Baleares son las que registran mayor número de «delitos de odio».
Las víctimas de estos delitos son en un 25,61% «menores de edad» con un total de 326 víctimas frente a las 370 de 26 a 40 años. Un 28% de los atacados son extranjeros.