Infobae.- El bochornoso episodio tuvo lugar en el encuentro entre los Toros de Tijuana y los Rieleros de Aguascalientes por la Liga Mexicana. Hubo cinco expulsados
Este miércoles el béisbol mexicano tuvo una triste jornada producto de la barbarie que se vivió en el partido que los Toros y los Rieleros animaron en Tijuana. El duelo deportivo se transformó en un enfrentamiento a golpes después de que el encuentro subiera la temperatura por algunos cruces y terminara en una batalla campal entre ambos planteles.
Más de 20 jugadores protagonizaron las imágenes que se viralizaron por todo el mundo. Todo comenzó cuando en la la sexta entrada Anthony Vizcaya, de los Toros, le dio un pelotazo al bateador José Guadalupe Chávez, quien se enojó y se quitó parte de la indumentaria. Fue el receptor Francisco Córdoba, de los Rieleros, el que se acercó a él algo molesto y tras un entredicho verbal se tomaron a golpes. Ese cruce provocó la expulsión de ambos jugadores y caldeó el duelo.
Los jueces echaron a ambos beisbolistas y todo parecía estar bajo control, pese a que se había generado un tumulto entre varios jugadores. Tras algunos minutos el juego se reanudó, pero al bronca era tal que pronto todo se desmadró nuevamente.
En la octava entrada Brandon Quintero, pitcher de los Toros, le dio un claro pelotazo al bateador Gabriel Gutiérrez y éste intentó entonces agredirlo con el bate, pero falló al arrojarlo. Por eso, empezó a correrlo por el campo y le tiró el casco para buscar lastimarlo. De inmediato, los jugadores de ambos equipos saltaron nuevamente al campo y se formó otra batalla multitudinaria.
La gresca llegó a tal punto que en un momento hubo hasta cuatro peleas en simultaneo en la cancha y el desborde fue total. Por esa nueva tangana hubo otros tres expulsados.
Al terminar el juego, que fue triunfo para los Toros por 5-3, la estrella de los Rieleros animaron en Tijuana, Leandro Castro, reflexionó sobre lo sucedido: “Espero que esto no siga pasando, creo que ellos tienen algo personal contra nosotros después del juego en la que le hicimos las 22 carreras. Creo que todo el que observó este juego vio que nosotros respetamos el juego”, y agregó: “Esto es un exceso de agresividad de ellos hacia nosotros”.
Es que los antecedentes de violencia entre estos dos equipos no son nuevos. La semana pasada en otro encuentro una batalla multitudinaria similar que acabó con la expulsión de un solo jugador por decisión del árbitro principal.