El Confidencial.- Bayern de Múnich y Lazio protagonizaron este martes una de las eliminatorias más emocionantes de las que se disputaban en octavos de final de la Champions League. Con el conjunto bávaro como claro favorito a pasar a los cuartos, fue el equipo lazial el que había logrado sacar ventaja de la ida en el Olímpico de Roma, por lo que la vuelta en el Allianz se presentaba mucho más apretada de lo que podía parecer en el momento del sorteo.
Aunque Immobile hizo contener la respiración de todos los hinchas locales con un cabezazo que se fue lamiendo la madera con 0-0, el Bayern acabó dando un puñetazo sobre la mesa en el tramo final de la primera mitad con los goles de Harry Kane y Thomas Müller, un golpe del que no se logró reponer la Lazio. El propio delantero inglés cerró la eliminatoria y aseguró el billete a la siguiente ronda con el 3-0 definitivo en el 66′.
Más allá de lo futbolístico, que la Lazio juegue fuera de casa, y más en Europa, siempre supone una alerta roja por sus ultras, y de nuevo los radicales del equipo italiano volvieron a ser noticia en su multitudinario desplazamiento a Múnich, con alrededor de 3.500 hinchas, para asistir al duelo frente al Bayern.
Los ultras de la Lazio profieren cánticos fascistas
Los ultras de la Lazio son conocidos por su ideología fascista y de nuevo hicieron apología de ella al reunirse en la cervecería Hofbräuhaus, el recinto de Múnich en el que Adolf Hitler realizó su primer gran discurso y fundó el partido nacionalsocialista alemán en febrero de 1920. En aquel bar, el líder nazi fue ganando cada vez más relevancia con su alegato antisemita, reuniendo a miles de personas en su interior en cada convocatoria.
Los aficionados de la Lazio se juntaron en el Hofbräuhaus y realizaron cánticos abiertamente fascistas a los camisas negras y a Benito Mussolini, dictador italiano y aliado de Adolf Hitler, con el brazo en alto: «Nos da igual la prisión, los camisas negras triunfarán. Si no triunfan, será el caos con porras y granadas. ¡Duce! ¡Duce! ¡Duce!«.