IN AND OUT.- Una investigación a puesto de manifiesto que profesores gays y lesbianas tienen menos probabilidades que sus colegas heterosexuales de disciplinar a los estudiantes cuando son testigos de acoso homofobo en la escuela, por temor a llamar la atención respecto a su sexualidad y poner en riesgo su carrera profesional.
Los profesores que pertenecen a la comunidad LGBT también tienen miedo de intervenir cuando escuchan lenguaje homófobo, incluso cuando los niños utilizan la palabra ‘gay’ como un insulto.
‘A menudo, los educadores LGBT son menos propensos a decir algo en respuesta a la homofobia, porque entonces podrían ser percibidos como gay’, dijo Tiffany Wright de la Universidad de Millersville de Pennsylvania, EE.UU., donde se llevó a cabo la investigación. ‘Ellos temen por su trabajo, o por las consecuencias que les traiga ser vistos como gay.’
Dr. Wright llevó a cabo entrevistas en profundidad con más de 350 profesores y directores sobre cómo hacer frente a los incidentes de homofobia en las escuelas.
Muchos de los entrevistados admitieron que no se sentían seguros de asumir su sexualidad abiertamente en las escuelas. Dos tercios dijeron que rara vez o nunca ven otro profesor intervenir cuando se hacen comentarios homófobo en la sala de profesores. Y 59 por ciento dijeron que habían escuchado comentarios homófobos de otros maestros.
Alrededor de la mitad de los docentes homosexuales admitió que no siempre impugnaban el lenguaje homófobo utilizado por los estudiantes.
La investigación sobre la homofobia en las escuelas estadounidenses sigue amplias campañas, estas se han tomado en cuenta en Reino Unido por parte de organizaciones benéficas de los derechos de los homosexuales para acabar con la homofobia entre los jóvenes.
Sin embargo, un número relativamente pequeño de profesores salen del armario en la escuela por temor a una reacción negativa. Los líderes escolares son especialmente reacios a revelar su homosexualidad.
Dr. Wright dijo que más de un tercio de los profesores que entrevistó estaban preocupados por el peligro que pudiesen correr sus puestos de trabajo si estos llamasen la atención con su sexualidad. Más de la mitad dijo que casi nunca se sintió cómodo interactuando con los padres.
‘Mucha gente, en teoría, podría estar a favor del matrimonio gay y tienen puntos de vista’, dijo el Dr. Wright. ‘Pero cuando estás hablando de sus hijos, eso es un poco diferente. Entonces, de repente, los prejuicios de la gente empiezan a salir. ‘
Sue Sanders, co-presidente de la UK-based LGBT teachers, dijo que hay una creencia generalizada de que si los maestros enfrentan la homofobia, sería también un desahogo o una salida para sí mismos.
‘Cuando una persona es muy homófoba, la suposición es que sea gay’, dijo. ‘Pero cuando eres miembro de un grupo minoritario, haces conciencia de que quien no pertenece a ese grupo, pues hay cosas que no logra ver ni comprender”
“Vemos a las mujeres que desafían el sexismo o a los negros el racismo”. Hay un miedo a que la gente diga eso, sólo porque eres lesbiana o gay, no se puede pensar que todo el mundo está en tu contra’.
El trabajo de investigación del Dr. Wright cita un ejemplo de su propia carrera docente, cuando en frente de los estudiantes un compañero maestro usó la frase ‘esto es tan gay’ queriendo referirse a “algo muy estúpido.’
Wes Streeting, director de educación en derechos de los homosexuales, dijo: ‘intimidar de manera homofoba es mucho más frecuente en las escuelas donde los profesores que no desafían el lenguaje homófobo. Si los propios profesores están usando este lenguaje, sólo Dios sabe cuál sería el efecto en los alumnos homosexuales’.
