OLGA R. SAN MARTÍN.- En Finlandia tienen un método contra el acoso escolar que se sigue en casi todas las escuelas y que ha logrado reducir este fenómeno a la mínima expresión. Parte de una premisa muy sencilla: en vez de centrarse sólo en la víctima y en el acosador, involucra también a los testigos, esos niños que no insultan pero lo consienten.
El Programa KiVa, financiado por el Gobierno del país nórdico, ha logrado cambiar las normas grupales, de tal forma que ahora los compañeros toman partido por el alumno acosado en vez de por el acosador. «En mi clase hablo cada día con mis alumnos sobre el bullying, pero también tenemos una clase específica dos o tres veces al mes. Si se trabaja mucho sobre el tema, los chicos acaban aprendiendo que no está bien acosar», explica a ELMUNDO un profesor finlandés.
España no es Finlandia, pero la sociedad española está comenzando poco a poco a ser consciente de las dimensiones de este problema. Tras las muertes de Carla,Arancha, Alan o Diego, el Gobierno en funciones ha decidido involucrarse en el asunto y ayer aprobó en el Consejo de Ministros el Plan Estratégico de Convivencia Escolar, un paquete de 70 medidas para combatir la violencia y los abusos en los centros educativos.
Una parte muy importante de este plan consiste en reforzar e incrementar la formación de profesores, padres, alumnos -y de la sociedad, en general- para que el bullying se aborde de la misma forma implacable con que se trata la violencia de género y deje de ser ese «grito silencioso» del que hablaba ayer el ministro de Educación en funciones, Íñigo Méndez de Vigo.
Clases contra el ‘bullying’
¿Y qué cosas concretas van a hacerse? Por un lado, los docentes van a recibir más formación en convivencia escolar con el fin de identificar mejor y saber actuar con más rapidez en los casos de acoso que se producen en los centros educativos.
No es que los profesores no estén formados ahora contra el bullying, pero fuentes del Ministerio explican que sólo tienen «una preparación puntual». La intención del Ejecutivo es que se generalice y se sistematice esta formación antes y durante la carrera docente.
En este sentido, el ministro habló ayer de crear «intinerarios de formación del profesorado» concretos en función de los tipos de docente, ya sean tutores, maestros, profesores de Secundaria o directores. Educación también va a introducir «contenidos específicos referidos a la convivencia escolar» dentro de las oposiciones para conseguir una plaza en la escuela pública, añaden las mismas fuentes. Y los que ya hayan pasado por un proceso de selección podránasistir a clasesantibullying presenciales o virtuales que coordinará el Instituto Nacional de Tecnologías Educativas de Formación del Profesorado.
Manuales de ayuda a familias
Por otro lado, las familias también van a tener la posibilidad de aprender más. Educación va a elaborar una Guía de Padres para identificar los signos del acoso y saber cómo actuar. Habrá también un manual de apoyo a las víctimas, con consejos para padres, alumnos y personal educativo.
A los niños y adolescentes, el Gobierno les va a ofrecer charlas habituales y generalizadas en el aula por agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil que se dedican a combatir el bullying. Y ha firmado, asimismo, un convenio con la Agencia Española de Protección de Datos para ofrecer a los críos materiales didácticos sobre el uso responsable de las redes sociales.
¿Y la sociedad?El Gobierno quiere concienciar a la sociedad mediante una websobre convivencia escolar, campañas de comunicación que coordina el Ministerio de Presidencia y la emisión por Fomento de un sello de correos.
El plan tiene ocho líneas de actuación y ha involucrado a buena parte del Gabinete de Mariano Rajoy. «El acoso no es sólo una cuestión de Educación, sino del resto de los ministerios», insistía ayer Méndez de Vigo.
Algunas de las 70 medidas que recoge el plan ya existían, pero, según explicó, la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, se van a reforzar. Es el caso del Plan Director Convivencia y mejora de la seguridad en los centros educativos y sus entornos de Interior. O del teléfono de ayuda y adolescentes financiado por Sanidad, al que ahora se añade otra línea gratuita que garantiza el anonimato y es atendida por psicólogos, pedagogos y expertos en leyes.
Hay otras iniciativas novedosas, como la elaboración de un registro estatal que recopile todos los datos sobre la violencia escolar (una gran reivindicación de las asociaciones, porque apenas hay estadísticas sobre el asunto); la creación de un protocolo estatal contra el acoso (que no existía, pero que, en la práctica, servirá sólo de «referencia» y «apoyo» a las autonomías, que son las que tienen las competencias), y la instauración de una red de escuelas «Tolerancia Cero» que reconocerá a nivel estatal a los colegios e institutos con mejores prácticas de convivencia.
