EFE.- La líder de la ultraderecha francesa, Marine Le Pen, sancionó hoy al «número dos» del Frente Nacional (FN), Florian Philippot, después de varios días de fricciones por declaraciones interpuestas y en pleno debate sobre la reorientación del partido tras la derrota en las presidenciales de mayo.
En un comunicado, Le Pen anunció que Philippot deja de ser el responsable de la estrategia y de la comunicación del FN, aunque sin retirarle el cargo de vicepresidente, en un gesto con el que se resiste a cargar con la decisión de una ruptura definitiva.
Se trata de un grupo de tinte soberanista, la corriente de la que él procede ideológicamente, que siempre ha sido mal vista por los militantes históricos del FN que se identifican con los valores tradicionales de la extrema derecha francesa.
Poco antes de que se divulgara el comunicado de la presidenta, Philippot había reiterado que no dejaría la presidencia de Los Patriotas, como tampoco tenía intención de «renunciar a (sus) convicciones», en una entrevista al canal «CNews».
Para él, esta polémica sobre su presencia al frente de esa asociación no es más que un «pretexto» para pesar en el debate de la refundación que se ha abierto para dar un giro tras la severa derrota en mayo de Le Pen en la segunda vuelta de las presidenciales frente al que se convirtió en jefe del Estado, Emmanuel Macron.
«El FN está cambiando completamente de línea, de dar una marcha atrás absolutamente terrorífica que trastoca a miles de personas», advirtió el vicepresidente de la formación.
