CNN BUSINESS.- A medida que la pandemia de coronavirus hunde a las economías de todo el mundo en la recesión, los gobiernos y las empresas se esfuerzan por encontrar formas para hacer que las personas vuelvan a trabajar. Una herramienta con la que muchos cuentan es la prueba de anticuerpos.
La esperanza es que las personas que han sido infectadas con el virus puedan haber desarrollado suficientes anticuerpos para hacerlos inmunes al virus y volver a trabajar de manera segura, aunque la ciencia en torno a esto está lejos de estar establecida. Algunos gobiernos incluso han considerado la emisión de “pasaportes de inmunidad” o certificados para aquellos que dan positivo.
Pero los expertos advierten que seguir este camino podría crear nuevos problemas, incluida la discriminación en los lugares de trabajo, o personas que intentan infectarse deliberadamente para poder regresar a sus trabajos antes, “jugando a la ruleta rusa” con sus vidas, como dijo un médico.
En un informe de los asesores científicos del gobierno del Reino Unido publicado la semana pasada, los expertos dijeron que las pruebas de anticuerpos generalizadas podrían incentivar a los empleadores a tomar medidas que equivalen a discriminación.
“Esto podría incluir no permitir que las personas con prueba de anticuerpos negativa regresen al trabajo, o solo contratar personal nuevo con resultados de prueba de anticuerpos positiva”, se lee en el documento. Ciertas tareas, como el trabajo orientado al cliente, podrían terminar asignándose solo a aquellos que dieron positivo.
“En algunas circunstancias esto puede ser apropiado, pero en otras puede constituir una discriminación adversa”, dijo el informe.
Es un acto de equilibrio complicado para los políticos, que necesitan conciliar los impactos negativos de poner en pausa a gran parte de la economía y mantener a las personas a salvo.
Con empresas cerradas y trabajadores no esenciales que se quedan en casa, la economía del Reino Unido, por ejemplo, enfrenta su peor colapso en tres siglos, según el Banco de Inglaterra. La Unión Europea se enfrenta a una recesión de “proporciones históricas”, advirtió su comisión, mientras que Estados Unidos ha visto su tasa de desempleo dispararse al más alto nivel desde que comenzó el mantenimiento de registros mensuales en 1948.
¿Quién vuelve a trabajar primero?
Rachel Horton, profesora de derecho de la Universidad de Reading, le dijo a CNN que los empleados del Reino Unido que sientan que enfrentaron discriminación debido a su estado de anticuerpos tendrían protecciones legales limitadas, ya que el estado de los anticuerpos no se considera actualmente una característica protegida por la ley antidiscriminación.
“No puedes presentar una reclamación de que tu empleador te ha rechazado o despedido debido a tu estado de anticuerpos en virtud de la Ley de Igualdad, porque no cabes en ninguno de los grupos protegidos en este momento”, explicó Horton.
Horton dijo que, en teoría, un empleador podría justificar exigirle a alguien que revele su estado de anticuerpos si pudieran demostrar que es necesario para la salud y la seguridad.
“Decir ‘estamos preocupados por la seguridad de nuestros clientes, nuestro personal, y esta es la única forma en que podemos gestionarlo de manera realista’ probablemente estaría bien”, explicó.
Kate Palmer, directora asociada de la firma de consultoría de recursos humanos Península, dijo que también existía el riesgo de que las empresas pudieran discriminar a los trabajadores que regresan según su edad.
“La gran pregunta para los empleadores ahora es ¿cómo deciden a quién llevar primero?”, dijo. “Desde una perspectiva comercial, probablemente recuperarías a tu equipo más rápido y productivo. Pero eso se inclina hacia tu personal más joven, lo que sería una discriminación”.
Falsa seguridad
Si bien muchos fabricantes comerciales se apresuran a producir pruebas de anticuerpos, al menos algunos en el mercado son fraudulentas o poco confiables, y producen resultados falsos positivos que podrían llevar a las personas a creer erróneamente que ya han sido infectados.
“En este momento puede ser posible para empleadores o personas obtener pruebas de anticuerpos que no han demostrado ser sensibles o específicas”, dijo la Dra. Natasha Hochberg, profesora asociada de medicina en las Escuelas de Medicina y Salud Pública de la BU.
Gente hace fila frente a una clínica en Nueva York para hacerse un test de anticuerpos el 27 de abril.
Hochberg, quien lidera los esfuerzos de prueba del Centro Médico de Boston, dijo que aún no está claro si la presencia de anticuerpos significa que alguien es inmune al virus, o cuánto tiempo podría durar la inmunidad, una advertencia que también emitió la Organización Mundial de la Salud.
El mes pasado, un informe del Centro Johns Hopkins para la Seguridad de la Salud dijo que “varios gobiernos y grandes empleadores” estaban estudiando el uso de pruebas de anticuerpos para crear certificados de inmunidad para liberar a las personas recuperadas de las medidas de distanciamiento físico. Sin embargo, las inexactitudes en las pruebas disponibles y la incertidumbre en torno a la inmunidad significaron que “este no es un paso justificable en este momento”.