JUAN IGNACIO LECHUGA. EL DESMARQUE.- El fútbol se prepara para volver… a puerta cerrada. La ausencia de aficionados en las gradas será, sin duda, la nota más llamativa del regreso de LaLiga, que prevé retomar la competición el 12 de junio. Sin público en el interior de los estadios, la Policía teme que grupos de aficionados y ultras hagan quedadas en los alrededores de los recintos y traza un plan para controlar esta posibilidad.
Según revela El Periódico, la Policía Nacional tiene una ‘Orden de Servicio Plan Desescalada COVID-19‘ en la que relatan las medidas a tomar en cada una de las fases de desconfinamiento. Ahí se incluyen también la vigilancia a los aficionados tanto en los entrenamientos como en los futuros partidos.
Las cuatro medidas de la Policía con los aficionados
José Ángel González Jiménez, director adjunto operativo (DAO), ha remitido a todas las jefaturas superiores el plan de la Policía para controlar a los aficionados. El objetivo se que no se produzcan masificaciones durante el estado de alarma. Aún no se contempla sin contemplar aún cuál sería la actuación en la ‘nueva normalidad’.
La primera orden va dirigida a los entrenamientos. «Vigilar ante la posibilidad de concentración de público para ver entrenamientos deportivos«, dice la orden. La idea es que no se produzcan agrupaciones de personas junto a la Ciudad Deportiva de cada club en ese regreso de los futbolistas al trabajo.
De igual forma, también tendrán que establecer «dispositivos de seguridad para partidos de liga profesional», además de «coordinar la seguridad para la celebración de encuentros deportivos». Dos medidas que suelen ser habituales en todos y cada uno de los partidos de fútbol profesional.
La Orden dirigida a la Policía añade un cuarto punto. «Controlar y seguir la actividad de los grupos radicales ante la celebración de partidos a puerta cerrada o con aforo limitado«. En este sentido, la idea es evitar que los grupos ultras de los equipos hagan grandes recibimientos en los alrededores del estadio, en la Ciudad Deportiva o quedadas para ver el fútbol cerca del estadio.
