Público/Federico Biestro.- Durante el mes de marzo se ha producido una escalada de agresiones sexuales contra niñas menores de 14 años, en las que los agresores eran también adolescentes y actuaban en grupo.
Los casos de violencia sexual perpetrados por menores de edad continúan creciendo en España, año tras año y con un especial repunte en este mes de marzo. A la agresión sexual a una niña de 11 años en el municipio barcelonés de Rubí, se le suman casos como los de Salou, Alacant, Madrid, Badalona o Esparreguera, con denominadores comunes: la mayoría de las víctimas son niñas menores de 14 años y sus agresores varones adolescentes.
El caso más llamativo en los medios de comunicación fue el que tuvo lugar en Badalona, donde una niña de 11 años sufrió una violación a punta de cuchillo por cinco menores de edad. Todo esto en un espacio público, en un centro comercial de la localidad barcelonesa.
También en Catalunya, donde los casos en los que menores de 14 años han sido acusados de delitos sexuales se han duplicado en los últimos ocho años, cinco jóvenes de entre 14 y 17 años golpearon y abusaron de una compañera de clase, de 14 años, en plena aula de su instituto en Rubí.
Este mismo mes, los Mossos d’Esquadra detuvieron a tres menores por agredir sexualmente a una niña de 13 años en Salou, Tarragona. Uno de ellos era pareja de la víctima, que acabó presentando la denuncia al sentirse amenazada en las redes sociales.
En otro municipio barcelonés, en Esparraguera, un joven de 15 años fue detenido por agredir sexualmente a una niña de 13. En Madrid, una adolescente que se había escapado del centro de menores del distrito de Hortaleza fue víctima de una agresión por parte de otros tres jóvenes. El caso más reciente, en Alacant, una chica de 16 años fue víctima de una violación grupal perpetrada por tres menores en Petrer.
Un aumento de casos a lo largo de los años
La violencia sexual es un problema que afecta a todas las edades, especialmente a mujeres y niñas, quienes son nueve de cada diez víctimas de estos casos, según los datos del Ministerio del Interior en el Informe sobre delitos contra la libertad e indemnidad sexual en España 2021. De los 13.545 delitos registrados en 2019, las cifran han aumentado en 2022 a 17.389, casi un 29% más, recoge el portal feminicidio.net del balance de criminalidad de Interior.
Los menores de 14 años acusados de delitos sexuales se duplican en Catalunya en los últimos ocho años
La mitad de la violencia sexual registrada tiene víctimas menores de edad, según este mismo informe, en los que en el 83% de los casos son niñas hasta los 17 años. Un 97% de los agresores sexuales son hombres, de los cuales un 8,4% son menores de edad.
Los casos de violencia sexual llevada a cabo por menores de edad ha crecido en los últimos años en España. En 2021 se llevaron a cabo 2.625 procedimientos por delitos contra la libertad sexual con menores implicados, frente a los 1.661 de 2020, según la Memoria anual de la Fiscalía.
El Instituto Nacional de Estadística (INE), por su parte, contabilizó 439 menores condenados por delitos sexuales en 2021 (un 12,6% más que el año anterior), los cuales cometieron 609 delitos de naturaleza sexual, casi 300 con una menor de 16 años como víctima de la agresión. Interior, por su parte, recogió la cifra de 872 menores de edad, de entre 14 y 17 años, investigados o detenidos por delitos contra la libertad sexual.
Violencia sexual en grupo por parte de menores
Los casos anteriormente mencionados tienen varios puntos en común. El primero, es que todos han tenido lugar en el mes de marzo, una prueba de la escalada de este tipo de casos. El segundo es que en la mayoría de ellos se trataba de agresiones sexuales perpetradas en grupo, en las que los agresores eran menores de edad.
En 2021, se registraron 573 agresiones sexuales en grupo, según datos de Interior, superando las cifras de 2020, con 415, y 2019, con 483. Una práctica, según señalan los expertos, que bebe mucho de la pornografía.
Una generación que aprende de la pornografía
El estudio de Save the Children (Des)información sexual evidencia que para el 30% de los menores el porno es su «única fuente de información sobre sexualidad». La fácil accesibilidad a la pornografía, a edades cada vez más tempranas, provoca que los jóvenes se insensibilicen ante prácticas sexuales violentas y quieran reproducirlas.
El 62,5% de las personas adolescentes encuestadas de entre 13 y 17 años
ha visto pornografía alguna vez en su vida, ya sea a través de internet o por otras vías. Estas cifras resultan más chocantes cuando se compara que el 87% de los chicos lo han hecho, frente al 39% de las chicas, según recoge el estudio. El 53% de las respuestas positivas vio pornografía por primera vez en edades de entre los seis y 12 años.
El 36,8% de quienes consumen con más frecuencia pornografía no distingue entre la ficción de la pornografía y sus propias experiencias sexuales. Además, los chicos son los que ven más semejanza entre la pornografía y prácticas propias en comparación con las chicas, indica el estudio. El informe anual entre el contenido más buscado en la web Pornhub durante 2021, señalaba el aumento del casi el 50% de búsquedas sobre prácticas sexuales en grupo. El 52,1% de los menores que ven pornografía frecuentemente confirma que esto ha influido mucho o bastante en sus relaciones sexuales y al 54,9% le gustaría poner en práctica lo que han visto, señala el estudio de Save the Children.
Exposición a las redes y ciberdelincuencia sexual
El fácil acceso a la pornografía va de la mano al fácil acceso a cualquier cosa en internet, y las redes sociales no son una excepción. La exposición, cada vez más temprana a las redes sociales, ha provocado un repunte de la ciberdelincuencia sexual en menores y el aumento de prácticas de riesgo.
El 20,2% de los menores que han visto pornografía ha compartido fotos o vídeos íntimos al menos una vez, señala Save the Children. En ocho de cada diez casos de ciberdelincuencia las víctimas son menores de edad, de las cuales el 72% son niñas, según los datos de Interior.
De los 808 casos registrados de ciberdelincuencia sexual, el 84% de las víctimas eran menores de edad, en los que el 8,2% de los detenidos o investigados eran también menores. El grupo de edad de 18 a 30 años presenta las cifras más altas.
Las agresiones sexuales hacia niñas por parte de otros menores de edad ponen en alerta no solo sobre su aumento de casos, sino que también sobre las posibles influencias de los agresores para llevarlas a cabo y qué medidas tomar para atajar esta problemática.