La vicerrectora Ana López se declara feminista, asegura que no es ni el vídeo ni la foto que quieren, y afirma que hay que trabajar de manera constante en la eliminación de las brechas de género.
09/05/2018 Público.es –Pero si no salen niñas.
Esta fue la respuesta que recibió el catedrático de Análisis Económico y Economía Política Juan Torres López cuando le preguntó a su hija, menor de edad, si quería ir a uno de los campamentos tecnológicos de verano, lúdicos y educativos, que organiza la Universidad de Sevilla. Torres, al comprobar que en la imagen publicitaria salía una sola niña, bien escondida, y que en el vídeo promocional, según contó él mismo, aparecían imágenes de chicos en más de 120 ocasiones y de chicas en menos de 20, además del descuido más absoluto en el uso de lenguaje no sexista, decidió escribirle una carta de protesta a Ana López Jiménez, vicerrectora de los servicios sociales y comunitarios de la Universidad de Sevilla. Torres la envió por correo electrónico ayer al filo de las dos de la tarde y, después la hizo pública en su cuenta de Twitter, con este texto: “Como parece que la tecnología es cosa de niños en mi universidad he tenido que enviar a la vicerrectora de servicios sociales la carta que adjunto en imagen”.
24 horas después, la Universidad de Sevilla había sacado la foto y retirado el vídeo de la página web. En la presentación, la vicerrectora López hace precisamente hincapié en que los cursos, lúdicos y formativos, persiguen específicamente trabajar la igualdad de género, además del compañerismo, el trabajo en equipo, la creatividad y la superación personal.
En conversación telefónica con Público, la vicerrectora explica: “Publicamos varias veces nuestras actividades. Tenemos una base de datos de fotos y las vamos cambiando en nuestras comunicaciones. Es una más de las fotos, deriva de una actividad real, y se ha distribuido, pero no es la foto que queremos. Si se entra en la página web, se verá que la publicidad es diversa y con discriminación positiva. Intentamos no hacer fotos de grupo para que no nos pase lo que nos ha sucedido. Seguimos teniendo una brecha de género en las carreras tecnológicas y estamos muy preocupadas”.
“Me declaro feminista. Somos conscientes de nuestra responsabilidad. Esto se nos ha escapado. Además de la imagen, tampoco me parece muy adecuada la locución del vídeo. El vídeo lo hizo una empresa hace dos años. Fue un vídeo que se grabó en una actividad real. Grabó una actividad de robótica. Lo que muestra ese vídeo es la realidad, la realidad penosa sobre la que tenemos que seguir trabajando desde la infancia para cambiar los roles que tenemos asignados. Me parece muy bien la preocupación del profesor Torres por su hija”, añade López. El vídeo es en realidad un reportaje que se ha utilizado como publicidad.
“Tenemos un problema grave con la incorporación de las mujeres en las carreras tecnológicas. Estamos muy preocupadas. Intentamos cuidar mucho los mensajes, porque tenemos un problema en las actividades de robótica, ingeniería mecánica y aeronáutica, donde se matriculan un 80% de chicos y un 20% de chicas. Intentamos que se vaya avanzando, pero muchas veces las cosas son lentas, muy lentas, de cambiar. En agosto se celebra un encuentro de ingeniería y lo primero que hemos dicho es que tiene que haber coordinadoras”, dice la vicerrectora.
El catedrático Torres, en su carta de protesta, le había escrito lo siguiente a López: “Lamento tener que escribirte no para felicitarte por la organización de los campamentos de verano sino para manifestar mi más enérgica protesta por el sesgo de género tan evidente que tiene la publicidad de los dedicados a actividades tecnológicas”.
“No tengo palabras que no sean fuertes y que prefiero no utilizar para referirme a una publicidad semejante de actividades educativas, sobre todo, cuando la hace nada más y nada menos que una institución como la Universidad, que debería servir de ejemplo en el fomento de la igualdad entre mujeres y hombres. Y no creo que sea necesario abundar sobre el efecto tan nefasto que ese tipo de mensajes tiene sobre los niños y niñas a la hora de promover sus aficiones y afinidades educativas presentes y futuras, o incluso sobre sus padres y madres”, había agregado Torres en la misiva.
“En consecuencia, te ruego formal y encarecidamente que des cuanto antes las órdenes oportunas para que dicha publicidad se sustituya, que tomes medidas efectivas para que no vuelva a producirse algo así en el futuro y, lo que quizá sea lo más importante, que informes al Rector y al resto del equipo de gobierno de lo que ha ocurrido para que reflexionen al respecto y encuentren la forma de promover con más eficacia las políticas de igualdad que eviten sesgos de género tan nefastos como el que te acabo de denunciar”, había rematado el catedrático.