El Correo.- Un alto funcionario de la Comisión Europea denunció ayer ataques contra comunidades y espacios judíos en el territorio de la Unión Europea, que calificó de «clara manifestación de antisemitismo». Margaritis Schinas, vicepresidente de la Comisión Europea responsable de promover el estilo de vida europeo, instó a los Estados miembros de la UE a actuar y pidió «permanecer vigilantes» contra esas manifestaciones.
«Profundamente preocupado por los recientes ataques contra comunidades y locales judíos en la UE. Son una clara manifestación de antisemitismo que deben ser condenadas enérgicamente», apuntó. «Apoyamos a nuestras comunidades judías y pedimos a nuestros Estados miembros que se mantengan alerta por su seguridad», pidió el alto funcionario.
Schinas explicó a la agencia France-Presse que su mensaje en Twitter era una respuesta a informes de hostilidad contra las comunidades judías en Alemania, Austria, España y Reino Unido. Anteriormente, el portavoz de la canciller Angela Merkel había advertido que Alemania no toleraría manifestaciones antisemitas, después que varias personas quemaran banderas israelíes en protesta contra la violencia de días recientes en Gaza.
A pesar de ello, cientos de personas salieron ayer a las calles de Berlín para protestar por la ofensiva israelí. Los participantes ondeaban banderas palestinas y coreaban lemas como ‘Libertad para Palestina’ y ‘Parad los asesinatos, parad la guerra’. El portavoz del Gobierno, Steffen Seibert, remarcó que las marchas pacificas contra las políticas israelíes sí están permitidas, pero que aquel que las aproveche para «gritar su odio a los judíos» estará «abusando del derecho de protesta». «Los mítines antisemitas no son tolerados por nuestra democracia», ha aseverado.
El presidente del Consejo Central de los Musulmanes en Alemania, Aiman Mazyek criticó duramente las protestas antisemitas y aseguró que «quien condena el racismo pero difunde este odio antisemita, lo ha arruinado todo».
Francia, mientras tanto, ha prohibido una marcha propalestina que estaba convocada para hoy por el temor de que desencadenara desórdenes y «ataques contra sinagogas e intereses israelíes», dijo el jefe de la Policía de París, Didier Lallement.