EFE. ELDIARIO.ES.- La cúpula de la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) se distanció hoy de las juventudes del partido por declaraciones racistas y mensajes de incitación a la violencia difundidos en foros de internet procedentes de ese espectro, al que se plantea desvincular de la organización.
«La presidencia de la AfD toma nota de las declaraciones denigrantes de algunos miembros de Joven Alternativa (JA). Y espera que la JA se desprenda de inmediato de esos miembros», afirmó la dirección del partido en un comunicado.
La cúpula ultraderechista se propone estudiar la situación creada en una sesión extraordinaria convocada a estos efectos, prosigue el texto, en la que se analizará si procede disgregar a las Juventudes de la estructura matriz del partido.
La reacción de la dirección del partido sigue a las informaciones aparecidas la semana pasada en medios alemanes según las cuales los servicios de espionaje de Interior siguen de cerca los pasos de las Juventudes del partido.
Militantes de la JA han difundido en foros de internet y redes sociales mensajes incitando al odio, al racismo y llamando a la acción en la clandestinidad.
En los foros de la JA se han colgado mensajes llamando a la «ejecución de todo el Gobierno» de la canciller Angela Merkel y llamado a buscar «otros caminos», ya que por «medios legales» no se logrará acabar con su «sistema injusto» y política migratoria «errónea» del Ejecutivo alemán.
El distanciamiento de la presidencia respecto a sus Juventudes coincide, además, con los contratiempos para la AfD derivados de las investigaciones abiertas por la Justicia alemana por unos donativos ingresados irregularmente en la contabilidad del partido.
Las investigaciones se dirigen contra la jefa del grupo de la AfD en el Parlamento federal (Bundestag), Alice Weidel, como presunta responsable del ingreso de esos donativos, por un monto total de 300.000 euros.
Supuestamente los fondos se destinaron a reforzar su campaña electoral para las generales de 2017, en que la AfD obtuvo un 12,6 % y se convirtió así en líder de la oposición en el Bundestag, en el que por primera vez desde los años cincuenta se sienta una formación ultraderechista.
Parte de esos fondos procedían de Suiza -donde por entonces tenía fijado su domicilio Weidel- y el donante era un empresario multimillonario, según revelaciones del diario «Der Spiegel».
La propia Weidel admitió la semana pasada que se cometieron «errores» en relación a esos donativos y explicó que han sido devueltos.
Las diligencias en torno a los donativos prosiguen y, según medios alemanes, una comisión parlamentaria ha propuesto que se levante la inmunidad a Weigel mientras se investiga el caso.