La profesora denunciada por agredir a la niña «daba clase con el lazo amarillo»
A. FERNÁNDEZ. EL CONFIDENCIAL.- El trasfondo político de la agresión a una niña en el colegio público Font de l’Alba, de Terrassa, ha levantado una auténtica polvareda en esta localidad, que hace pocos meses se ha convertido en la tercera población de Cataluña por número de habitantes. El suceso es la comidilla de toda la ciudad: una niña fue supuestamente agredida por una profesora, Miriam F., presuntamente por haber dibujado una bandera española y escribir la consigna ‘viva España’ en el álbum de fin de curso.
El parte médico es inapelable, al detallar las lesiones de la niña. Pero también otros compañeros de la menor, de 10 años, avisaron del suceso a la madre en el momento en que ocurría (la progenitora esperaba a la pequeña a la puerta del colegio), detallando cómo la maestra la había tirado al suelo. Tras 48 horas de conmoción y polémica de alto voltaje en los medios de comunicación, algunos de los pequeños comienzan a cambiar su versión y optan por el silencio: el miedo a ser señalado comienza a imponerse.
En el parte médico aparece un relato del suceso que no deja en buen lugar a la profesora: dice que esta, al ver lo que había dibujado la niña, la gritó y luego la cogió de la camiseta, cayéndose al suelo y lastimándose. Después, la cogió del cuello y la sacó de clase. La niña fue diagnosticada de dorsolumbalgia (por la caída) y de “contusión en el primer dedo”.
Fuentes que conocen de cerca a la familia explican a El Confidencial que no es la primera queja que hay de esta profesora. Aunque esta semana ha cancelado su página de Facebook, en ella constaba que milita en Òmnium Cultural y hacía publicidad del Front per la República, una plataforma ultraindependentista. Además, subrayan que era una profesora “que asistía a clase portando el lazo amarillo”, contraviniendo las normas legales de no impartir clase con símbolos políticos a la vista. Otra fuente explica que Miriam F. “es una persona con un perfil marcadamente político”.
Con la niña agredida ya había tenido sus más y sus menos. “Pero nunca la cosa había pasado a más. En una ocasión, la profesora lanzó un ‘visca els països catalans’, a lo que la niña respondió con un ‘viva España’, pero nada más. Lo que parecía haber era una cierta animadversión contra la pequeña, parece ser que por los posicionamientos políticos contrarios de ambas”, explican las fuentes.
Denuncia a los inspectores de Educación
Una persona muy cercana a la familia señala también a este diario que el padre habló con la directora del centro el martes por la mañana y le entregó tanto la denuncia interpuesta en los Mossos d’Esquadra como el parte médico de la niña. También le pidió que se abriera una investigación, al mismo tiempo que le anunció otra denuncia en la Consejería de Educación para que el inspector de zona investigue lo sucedido. Desde la dirección del centro le aseguraron que se investigaría el tema y que hablarían con la profesora, pero no le dijeron nada más. “Solo que la familia mantuviera discreción sobre el temahasta que se aclarara lo sucedido”, añaden las fuentes. Pero la polémica saltó a los medios de comunicación.
La misma fuente resalta que “hasta ahora no había habido nunca ninguna agresión de este calibre, al menos no hasta el punto de lo que pasó este lunes, aunque está claro que esto no responde a una actitud puntual. El perfil de la profesora es el que es y ya había dado muestras de que la neutralidad política que ha de tener un centro escolar o un profesor se la pasaba por el forro. Y no hay duda de que en todo este asunto lo que hay es un trasfondo político”.
Todos los intentos de este diario de obtener la versión del colegio resultaron inútiles. La profesora, por su parte, es miembro del consejo escolar en representación del profesorado. También era la tutora de cuarto B, de Primaria. En su oferta educativa, el colegio destaca los trazos de su proyecto educativo: “El respeto al pluralismo y la interculturalidad; la defensa y aplicación de los valores democráticos; la defensa de la coeducación y la igualdad de derechos sin discriminación por razones de sexo, etnia o creencia”. Lo cierto es que, tras la polémica, esos principios y la propia neutralidad del colegio han quedado en entredicho. La alumna no aparece por el centro desde el lunes y, según explican a este diario fuentes cercanas a la familia, tampoco tiene intención de hacerlo en los días que restan hasta las vacaciones. Estas fuentes explican también que lamentan lo ocurrido y subrayan que “la investigación debe seguir su curso. Dejemos que los Mossos actúen y que los inspectores hagan sus informes y entonces ya veremos”.