ÓSCAR RODRÍGUEZ. EL CONFIDENCIAL.- El racismo en Estados Unidos sigue a la orden del día y el último ejemplo lo encontramos en Corey Lewis. Este afroamericano es el dueño de un servicio de orientación para jóvenes llamado “Inspired by Lewis” y estaba cuidando de dos niños blancos, disfrutando de un tranquilo día en un centro comercial del condado de Cobb, en Georgia, al sudeste del país.
Sin embargo, una mujer pensó que la combinación de un hombre negro y dos niños blancos no casaba bien y decidió actuar. Antes de que el trío se metiera en el coche para volver a casa, la mujer quiso preguntar a los niños si se encontraban bien, a lo que Lewis se negó al estar sufriendo un claro caso de racismo. Pero la señora no se dio por vencida, siguió al coche de Corey Lewis hasta su propia casa y decidió llamar a la policía.
Lewis decidió grabar toda la secuencia con el policía y subirla a su cuenta de Facebook. Ahí se puede ver cómo el oficial le dice que les han visto en el centro comercial y que quiere interesarse por el estado de los niños. Incluso les obliga a salir del coche para que confirmen que Corey Lewis está cuidando de ellos.
Una vez que la niña dice al policía lo que está pasando, Lewis se queja de estar sufriendo una persecución en pleno 2018. En el vídeo, se le escucha decir que está «siendo seguido y acosado. Tengo dos niños a los que estoy cuidando. Ella (por la mujer) me echó la bronca diciendo, ‘¿están los niños bien?’ ¿Por qué no iban a estar bien?»
Corey Lewis relata en su cuenta de Facebook de que el policía no se quedó tranquilo hasta que llamó a los padres de los niños. En declaraciones a CBS46, la madre de los niños, Dana Mango, reproduce la conversación con el policía: “¿Está diciendo que porque hay un afroamericano llevando en coche a mis dos hijos blancos le han parado, obligado a bajar del coche y cuestionado?”, pregunta la madre, a lo que el policía responde: “Lo siento señora, es exactamente lo que estoy diciendo”.
«Es increíble. Estamos en 2018 y esto es con lo que tengo que lidiar”, concluye Corey Lewis.