ARSENIO CUENCA. EL ORDEN MUNDIAL.- Las teorías de la conspiración han provocado algunos momentos tensos en la crisis del coronavirus. No solo por el peligro para la salud pública que representan, sino también por cómo las ha instrumentalizado la extrema derecha. Muchas de ellas, de apariencia científica, esconden ideologías reaccionarias compartidas por distintos movimientos a nivel internacional.
Varias teorías de la conspiración actuales están vinculadas al conservadurismo religioso o a ideologías xenófobas como el antisemitismo. Algunas se han reformulado durante la pandemia de la covid-19, creciendo en el terreno abonado de la incertidumbre y el malestar. Al mismo tiempo, representantes de la extrema derecha internacional se han hecho eco de ellas para capitalizar ese descontento social. El movimiento antivacunas, por ejemplo, ha estado vinculado a la Iglesia desde sus orígenes en el siglo XVIII. La teoría antisemita QAnon, más reciente, presenta a Donald Trump como un enviado de Dios para enfrentar la red internacional de pedofilia “Estado profundo”, dirigida por líderes demócratas como Hillary Clinton o el empresario judío George Soros.
Parte de la extrema derecha también ha menospreciado el alcance de la pandemia o incluso ha negado su existencia. Lo han hecho Trump en Estados Unidos y Jair Bolsonaro en Brasil. Mientras que organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) advertían del peligro, los presidentes del primer y tercer país con mayor incidencia de casos en el mundo, respectivamente, hacían oídos sordos a las recomendaciones de sus responsables …