ABC.- El suceso, ocurrido en Freudenberg, ha conmocionado a Alemania. Las niñas, de la misma edad, confesaron cuando la policía halló incongruencias en su declaración.
Una niña de 12 años fue asesinada el fin de semana a manos de dos compañeras de clase, de la misma edad. Ocurrió en Freudenberg, al oeste de Alemania, cuando las chicas la apuñalaron hasta 30 veces.
La policía germana está siendo muy cuidadosa con la información que revela, dado que tanto la víctima como las asesinas confesas son menor de edad, pero se han conocido algunos detalles del contexto del crimen.
Según explican las autoridades, la fallecida había hecho amistad con sus futuras asesinas durante meses en el colegio, aunque no todo era tan feliz como parecía.
Las dos atacantes no la trataban bien, hasta el punto de que recientemente la niña fallecida había confesado a un adulto de su entorno que estas le hacían bullying.
El sábado por la tarde las tres niñas habían quedado como un fin de semana normal y fueron a dar un paseo por el bosque, donde ocurrió todo.
Los padres de la niña denunciaron su desaparición y el cuerpo fue hallado el domingo por la mañana tras intensas horas de búsqueda.
Asesinas confesas
Las niñas fueron consideradas sospechosas dado que su testimonio no encajaba con el que habían ofrecido otros testigos que vieron a la víctima con ellas el sábado por la tarde. De hecho, llamaron a los padres de la niña a la que acababan de matar para decirles que ellas la habían dejado de camino a casa.
Durante un segundo interrogatorio ante varios psicólogos, confesaron haber cometido el crimen.