El Comercio/A. FUENTE.- La madre amplía la denuncia en la Policía Nacional ante los constantes insultos que recibe de otras menores a través de redes sociales.
Lejos de disiparse, la «pesadilla» de la niña de trece años que fue agredida por un grupo de menores en El Entrego sigue alimentándose con nuevas amenazas y más insultos que continúa recibiendo a través de redes sociales, aseguró ayer la madre. «Vamos a dar los pasos que consideramos necesarios, las medidas legales oportunas. Por eso vamos a ampliar la denuncia ante la Policía Nacional, y que la Justicia actúe como considere. La niña tiene más miedo que nunca», declaraba, junto a su casa, Aroa Álvarez Díaz.
La Fiscalía del Principado ya ha tomado cartas en el asunto e informó de que la Sección de Menores tiene abiertas diligencias preliminares para recabar información acerca de la supuesta paliza que dieron a la niña a mediados del pasado mes en El Entrego. Se trata de cinco menores, cuatro de trece años y otra de quince, que han sido identificadas como presuntas autoras de la agresión. Se ha solicitado al centro escolar en el que estudian un informe sobre los hechos y, en su caso, las medidas adoptadas al respecto.
La Consejería de Educación señaló que el centro educativo siguió el procedimiento establecido y abrió el protocolo de acoso escolar a raíz de la denuncia presentada por la familia «tras una agresión ocurrida fuera del colegio», incidió de nuevo. El centro concertado de El Entrego donde cursa segundo de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) la niña que sufrió la grave agresión grupal «realizó la preceptiva investigación y se lo comunicó al Servicio de Inspección con la intención inicial de desestimar el caso, es decir, cerrarlo». El Servicio de Inspección analizó la documentación y le requirió que ampliara la investigación. Al mismo tiempo y mientras se llegaba a una conclusión, le instó a que adoptara medidas de vigilancia y acompañamiento y también pedagógicas. El Servicio de Inspección también recibió a la familia y le trasladó toda esta información. «En estos momentos, el protocolo continúa abierto».
Acuerdo con el centro
La voz de alarma la daba la madre de la niña a través de las páginas de EL COMERCIO. Asegura que desde febrero sufre el hostigamiento de varias compañeras. Se interpuso la correspondiente denuncia ante la Policía Nacional, que remitió las diligencias a la Fiscalía de Menores el pasado mes. Aroa Álvarez mantuvo ayer un encuentro con la dirección del centro. Llegó a un acuerdo para que la escolar acabara el curso allí debido a que apenas quedan unas seis semanas lectivas. «Se incidió en que se va a hacer cumplir el protocolo de conducta para evitar problemas entre ellas. Hoy me he sentido apoyada y creo que va a funcionar». No obstante, ya tienen decidido el cambio de centro para el próximo curso.
La madre de la niña quiso lanzar un mensaje de agradecimiento «por todo el apoyo dado por la Asociación contra el Acoso Escolar en Asturias, sobre todo en la figura de su presidenta, Encarna García, quien nos trasladó todo su respaldo en los momentos más complicados».