El Correo.- La violencia en los campos de fútbol ha vuelto a aparecer en el fútbol base. La última trifulca tuvo lugar el pasado fin de semana en Plentzia en un partido de juveniles. La Ertzaintza tuvo que montar un dispositivo especial después de comprobar que un grupo de ultras locales había hecho un llamamiento en las redes sociales para acudir a ‘molestar’ al equipo visitante, que era el Gaztelueta.
De hecho, el citado grupo irrumpió en el campo a quince minutos de que terminase el encuentro, aunque previamente había colgado un cartel en el que decía que ‘no sois bien recibidos’ en referencia al colegio que fue a jugar. Según ha podido saber EL CORREO, los agentes les retiraron los artefactos pirotécnicos que portaban en un carro y varias patrullas permanecieron en el lugar hasta que tanto los jugadores como los progenitores abandonaron el campo para evitar incidentes tras el encuentro.
La Federación vizcaína de fútbol ha investigado el percance pero el comité de competición ha decidido no sancionar al club local al entender que no se puede demostrar la connivencia del club. No es la primera vez que grupos ultra formados por chavales muy jóvenes, algunos incluso menores, acuden a campos de fútbol base para generar altercados, insultar y asustar a los visitantes.
Desde la SD Plentzia lamentaron profundamente los hechos. Aseguraron que son «menores» pero que «nosotros les vamos a identificar y si juegan a mayores hablaremos con los padres y tendrán que atenerse a las consecuencias». Solicitaron al Ayuntamiento que cierre el campo para que no puedan acceder, como hacen actualmente y recordaron que desde la propia entidad se solicitó a los chavales que no insultasen al equipo visitante. «Los primeros que condenamos lo sucedido somos nosotros». «Son chavales que no respetan nada y queremos erradicarlo», añadieron.
Con capuchas
Hace unas semanas también hubo incidentes en Berango donde un grupo tapados con capuchas arremetieron e incluso impidieron salir al equipo visitante. Según lamenta José Ángel Labrador, vicepresidente de la Federación vizcaína de fútbol, de hace un tiempo a esta parte están apareciendo «grupos que van a meter ruido, pero los clubes no son responsables». También ha pasado en Karrantza. En todo caso, advierte que no se tolerarán este tipo de situaciones y se sancionará «duramente» si se confirma que los equipos están involucrados.