El candidato al que apoyaba Matteo Salvini, Christian Solinas, se convertirá en presidente de la región
LORENA PACHO. EL PAÍS.- Las últimas elecciones regionales en Italia avalan una tendencia cada vez más sostenida: La Liga crece y el Movimiento 5 Estrellas cae en picado. Una coalición de derechas capitaneada por la Liga ganó este lunes las elecciones regionales en Cerdeña, hasta ahora gobernada por el centroizquierda, mientras que el partido de los grillinos se ha desplomado.
Por un lado, Salvini canta victoria. El candidato al que apoyaba, Christian Solinas, se convertirá en presidente de la región y la Liga —en sus primeras regionales en Cerdeña— se ha erigido como el partido más votado de la coalición de derechas, con el 11,8%, por delante de Forza Italia de Silvio Berlusconi.
El líder ultraderechista ha sido muy activo en la campaña electoral. Durante la última semana ha recorrido la isla de punta a punta, se ha reunido en calidad de ministro del Interior con los representantes de los ganaderos sardos, que desde hace semanas protestan por la caída del precio de la leche de ovino en origen y les prometió soluciones urgentes que no llegaron antes del día de las votaciones. La estrategia regional que lleva un tiempo preparando pasa por hacerse con la hegemonía territorio a territorio. En 2017, para las elecciones generales, formalizó una alianza con el partido local de Solinas, que senador de la Liga.
En el lado opuesto, el M5S, que pierde protagonismo a pasos agigantados en el Gobierno nacional, ha recibido un golpe bajo. Ha perdido más de 30 puntos respecto a las elecciones generales del año pasado, en las que fue el más votado de la isla, y se queda en torno al 10%. Esta derrota llega dos semanas después de otro varapalo electoral en los Abruzos, donde se dejó 20 puntos.
Desde el Movimiento evitan dramatizar y achacan la debacle a su escasa cohesión en el territorio. Se afanan en decir que no cambiará nada en el Gobierno, pero las turbulencias internas se redoblan y empiezan a surgir los primeros malestares. La senadora Paola Nugnes, cercana al presidente de la Cámara de los diputados Roberto Fico y que lleva tiempo advirtiendo sobre los riesgos de un acercamiento excesivo a la Liga, ha llegado a poner sobre la mesa el cuestionamiento del liderazgo de Luigi di Maio. El líder de los grillinos anunció la semana pasada una profunda reorganización del Movimiento después de la hemorragia de votos y este lunes comunicó que los próximos días llegarán novedades importantes.
A la espera de las elecciones europeas de mayo, los resultados demoledores para el M5S en las regiones abren el camino a un replanteamiento de las jerarquías dentro de la coalición de un Gobierno en el que la Liga lleva la batuta, con Salvini cada vez más fuerte y omnipresente.
El centroizquierda ha perdido el Gobierno de Cerdeña (cada vez le quedan menos regiones), pero ha conseguido unos resultados mejores de los esperados. El Partido Democrático ha sido el partido más votado en solitario, con en torno al 12% de los votos, un porcentaje similar al de las pasadas generales.