Déborah Loupien-Suares ha calificado de «acto de cobardía» la profanación, este fin de semana, del cementerio de la comunidad judía en la capital labortana. Una docena de tumbas o estelas han sido dañadas o destruidas a consecuencia del ataque, según pudo constatar el domingo la propia presidenta de la comunidad judía de Iparralde
NAIZ.- Déborah Loupien-Suares, presidenta de la comunidad judía de Iparralde, descubrió este domingo que personas desconocidas habían profanado el cementerio. Varias estelas y tumbas, en torno a una docena, estaban dañadas o destruidas.
En los micrófonos de la emisora pública France Bleu-Pays Basque Loupien-Suares ha rechazado este martes el ataque.
«Hay un sentimiento de estupor cuando se descubren unas tumbas profanadas. No conozco acto más cobarde que atacar a los muertos», ha asegurado.
La presidenta de la comunidad judía dio a conocer lo ocurrido tanto a la Policía como al Ayuntamiento de Baiona, el mismo domingo. De inmediato, las autoridades se desplazaron al lugar y una investigación se ha puesto en marcha para determinar las responsabilidades de este ataque, que ha sido recibido con muestras generalizadas de rechazo.
Es la primera vez que el cementerio de Baiona es objeto de un ataque. No obstante, el pasado 2 de enero varios desconocidos penetraron, al parecer, en el recinto de la sinagoga.
Ataques recurrentes contra la mezquita
Más recurrentes han sido hasta la fecha los ataques contra el lugar de reunión de la comunidad musulmana, cuya mezquita, en la capital labortana, ha sido objeto de varios ataques. Uno de esos ataques se produjo, precisamente, en el contexto del mortal atentado contra el semanario satírico «Charlie Hebdo» del que hoy se cumplen cinco años.
El ataque más grave se produjo el pasado mes de octubre, cuando un ex candidato del Frente Nacional en la localidad de Saint-Martin-de-Seignanx, lindante con Baiona, trató de incendiar el lugar de culto e hirió a dos personas.