Sara Hernández dice que no va a retirar de la plaza del Ayuntamiento una maniquí que simula a una mujer asesinada la campaña porque busca «remover conciencias»
VICTORIA TORRES BENAYAS. EL PAÍS.- «Energúmena», «imbécil», «anormal», «despojo humano», «tarada», «enferma», «gilipollas», «psicópata»… La alcaldesa de Getafe, la socialista Sara Hernández, ha denunciado este jueves las «decenas de insultos» como estos que ha recibido a través de Twitter al hilo de una publicación de Vox Getafe en la que pide la retirada de una campaña de concienciación contra la violencia machista.
Se trata de un maniquí, cubierto con papel de aluminio, que simula a una mujer asesinada por su pareja y que fue colocado el lunes 18 dentro del programa con motivo del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, diseñado por el Consistorio junto con el consejo sectorial, un órgano participativo en el que están las asociaciones de mujeres. Este año, el lema es Tú eres la solución porque, como explica por teléfono la alcaldesa, «tú puedes hacer mucho, si lo escuchas, si lo ves, no puedes permanecer impasible, no puedes callarte, tienes que denunciar la violencia contra las mujeres».
Sra. Alcaldesa @sara_heba, en las últimas horas son muchas las llamadas recibidas de getafenses indignados por estas imágenes. ¿Le parece a Usted bien asustar a los viandantes con las ocurrencias del Gobierno Municipal de #Getafe ?
El año pasado, por ejemplo, plantaron en la misma plaza una cruz por cada crimen machista, incluido el que se cometió en la ciudad, el padre en proceso de separación que acabó con sus dos hijos, de 8 y 13 años. En lo que va de este año, en Getafe no se ha producido ninguno. La alcaldesa toca madera.
El sábado 23, Vox clamó contra la maniquí en Twitter y en Facebook. «Sra. Alcaldesa, en las últimas horas son muchas las llamadas recibidas de getafenses indignados por estas imágenes. ¿Le parece a usted bien asustar a los viandantes con las ocurrencias del Gobierno Municipal de Getafe?», le preguntaron en Twitter.
Hernández no quiere asustar a nadie, lo que quiere es «concienciarlos». Reconoce que la imagen no es agradable, pero replica a las críticas de Vox que «lo que no es agradable es la violencia de género». «Nos están matando a diario y no hablar de ello, no ponerlo sobre la mesa, solo contribuye a ocultarlo y a empeorar el problema», sostiene.
Una mujer le recrimina en el hilo que «eso lo ven niños pequeños, ¿le parece normal? Cuando le pregunten a sus padres que es eso que están viendo. Debería darle vergüenza». Hernández lo que espera es que los padres puedan hablar con sus hijos de «este grave problema» que todas las administraciones públicas deberían tener como «la prioridad número uno»
El mensaje de Twitter tiene 290 retuits a primera hora de la tarde de este jueves, 470 me gusta y una hilera de contestaciones cargados de furibundos ataques personales contra la alcaldesa. En Facebook son 72 mensajes muy similares. Hernández, que gobierna con 11 concejales de una corporación de 27, dos de ellos de Vox, tiene la piel curtida de recibir críticas e incluso insultos. Pero estos no ha querido dejarlos pasar por el nivel de violencia —»cuando vi lo de despojo humano no pude más»— y por el tema del que se está hablando, con el que no piensa consentir «ni un paso atras».
«Algunas son cuentas anónimas y sospechamos que hay perfiles falsos», explica la alcaldesa, que ha lamentado que ante estas descalificaciones, «el grupo municipal de Vox ha permanecido en silencio, consintiéndolas». «Me molesta el silencio de Vox, que permita sin decir nada semejantes insultos», confiesa.»Vox está incitando al odio y a la violencia», resume.
La alcaldesa de Getafe, donde Vox quedó como cuarta fuerza en las últimas generales mientras se extendía por el resto de la periferia, considera «muy triste» la impunidad con la que, desde las redes sociales «muchos machistas niegan la violencia de género e insultan a quienes defienden a una sociedad realmente igualitaria para mujeres y hombres».
No piensa presentar una denuncia ante la policía, sabe que es muy difícil lograr condenas, lo que busca es hacer «una denuncia pública, ante la sociedad». Tampoco va a retirar la campaña, que se mantendrá como estaba previsto hasta principios de diciembre, ni teme ataques al maniquí, que está frente a los policías y las cámaras que vigilan el Ayuntamiento. Este periódico ha tratado de recabar la opinión de Vox, de momento sin respuesta.