La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIRef) ha publicado su primera previsión demográfica, en la que estima que la población en edad de trabajar se mantendrá en torno a los 30 millones en 2050. El organismo prevé la llegada neta de unos 270.000 inmigrantes anuales hasta 2050, mientras que el INE sitúa esta cifra en torno a los 45.000 anuales. Los analistas fiscales consideran que la población española puede crecer hasta los 60 millones de habitantes, gracias también a un incremento de la tasa de fecundidad
LAURA OLÍAS. ELDIARIO.ES.- La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIRef) ha publicado su primera previsión demográfica, en la que considera que la población española crecerá en los próximos 30 años más de lo que calculan las cifras oficiales del INE. El organismo estima que la población puede llegar hasta los 60 millones de personas en 2050, respecto a los 44 del INE, y gran parte de esa diferencia se sustenta en una notable diferencia en la previsión de llegadas de inmigrantes: la AIReF calcula que llegarán unos 270.000 inmigrantes netos en los próximos años, mientras que las cifras oficiales son seis veces inferior, unas 45.000 personas anuales.
Las previsiones de la AIReF, presentadas este jueves en Madrid, calculan que la población española en 2050 alcanzará entre los 51 y 60 millones de personas, lo que en términos totales implica un incremento respecto a las proyecciones del INE y Eurostat, que apuestan por los 44 y 49 millones de personas para ese año.
¿Cómo se explica la brecha tan grande entre la migración estimada por los analistas de la AIReF y los del INE? El Instituto Nacional de Estadística hace una proyección que se corresponde con un flujo fijo anual igual al último dato observado, lo que para la AIReF «genera significativos errores de previsión e importantes revisiones». Esta nueva previsión demográfica tiene en cuenta varios determinantes relacionados con la migración: factores fijos (distancia geográfica o similitud de lenguas) así como condiciones económicas aproximadas por el nuvel de PIB per cápita y la estructura demográfica de cada país, entre otros factores.
El estudio migratorio de la AIReF descansa sobre las investigaciones del profesor Jesís Fernández-Huertas de la Universidad Carlos III de Madrid, que estima los flujos bilaterales de migración para todos los países del mundo en el largo plazo. Según este análisis, España recibirá unos 270.000 inmigrantes netos al año de países de América Latina y el norte de África, fundamentalmente. Con estos datos, el peso de la inmigración sobre la población total pasaría del 10 al 15%, apunta la AIRef, que subraya que esta cifra se mantendría aún por debajo «de otros países de la OCDE».
Aliviar la dependencia de los ancianos
Aunque la población total sea mayor, la AIReF es más optimista en cuanto a qué cantidad de ciudadanos tendrá España en edad de trabajar: mientras que el INE prevé una contracción de unos 7 millones de personas en la franja de los 16 a 66 años, la autoridad fiscal independiente considera que el número no variará significativamente respecto al actual, y que se mantendrá «en torno a los 30 millones» de personas.
La previsión de los analistas fiscales se aleja del camino hacia una «japonización» de la economía, con un envejecimiento de la poblacion inevitable, que el organismo de análisis no comparte.
Estas nuevas previsiones demográficas con más poblacion joven alimentada en parte por la inmigracion podrían relajar, en los escenarios más optimistas de la AIReF, la tasa de dependencia (relación entre la población mayor y la población en edad de trabajar) respecto a la del INE: el organismo considera que esta tasa se puede duplicar del 25% actual hasta un rango del 45 -60% en 2050. Esta última cifra, el 60% de tasa de dependencia es la estimada por el INE.
En un momento de gran debate sobre el aumento del gasto en pensiones de los próximos años, el estudio de la Airef muestra que el rumbo hacia una población más envejecida sigue estando ahí, pero con una gran diferencia en la cantidad de personas en edad de trabajar, entre las que se encontrarán los trabajadores que contribuyan a la Seguridad Social con sus cotizaciones sociales.
En la AIReF advierten de que, «a pesar de que el impacto económico de la inmigración en los países de destino suele ser positivo», el aumento de la llegada de extranjeros suele provocar «un sentimiento de rechazo y desconfianza». Los analistas precisan que estas ideas provienen en muchos casos «de una percepción errónea sobre la magnitud, naturaleza y efectos de la inmigración».
Más hijos: hasta 2 hijos por mujer en 2050
Las previsiones de la AIReF parten, sobre todo, de dos supuestos: el mencionado aumento de la inmigración, pero también en el crecimiento de la tasa de fecundidad por encima también de los cálculos del INE.
Los analistas fiscales estiman que la tasa de fecundidad, que en la actualidad se sitúa en 1,3 hijos por mujer, alcance un número de entre los 1,8 a 2 hijos por mujer en 2050. Su previsión eleva notablemente la realizada por el INE (algo superior a 1,4 hijos).
En opinión de los responsables del estudio, uno de los factores que está lastrando la fecundidad en la actualidad es la precariedad laboral, especialmente la temporalidad de los contratos de trabajo. Una mejora en este aspecto, apuntan, con un aumento del trabajo indefinido, podría incrementar a corto plazo la tasa de fecundidad.
También contribuiría a aumentar este indicador –aunque no de manera acusada– la llegada de inmigrantes, que «podría explicar un impulso adicional a la fecundidad de las residentes, como se observó en España en el periodo de 2000-2008», recoge el informe.
Además, fuentes de la AIReF subrayan que las políticas de fomento de la natalidad que han aplicado países de nuestro entorno europeo, como Alemania recientemente y Francia y los Países nórdicos desde hace años, han demostrado tener efectos positivos para elevar la fecundidad «en el corto plazo».