«Aparte de las agresiones físicas, también hubo insultos, menosprecios y robos de material a diferentes peñistas, entre ellos a miembros de la junta que ya tenían amenazados y después de los hechos continúan amenazando»
EL MUNDO.- La Agrupació de Penyes Albinegres (ADPA) emitió este miércoles un comunicado tras unos incidentes ocurridos a la conclusión del encuentro del pasado domingo en Cuenca. Según la ADPA, «el grupo ultra Frente Orellut amenazó, acorraló y agredió a diferentes miembros de distintas peñas de la Agrupació» desplazados con los autobuses fletados por esta asociación. «Aparte de las agresiones físicas, también hubo insultos, menosprecios y robos de material a diferentes peñistas, entre ellos a miembros de la junta que ya tenían amenazados y después de los hechos continúan amenazando».
«Desde el 27 de julio de 2017, con la agresión por parte de miembros del grupo ultra anteriormente citado, a miembros de una de nuestras peñas, llevamos denunciando públicamente e internamente al club esta situación intolerable», afirman desde la ADPA, que asegura que «la respuesta del club, de una forma u otra, siempre ha sido la misma: no hacer nada». Además, se preguntan «¿por qué el club proporciona entradas a aquellos que dice querer expulsar? ¿Por qué el club abre las puertas de un entrenamiento a puerta cerrada a los ultras que se dedican a agredir a los peñistas».
La ADPA denuncia también que «esta es la segunda vez que un trabajador del club acompaña a los ultras pero esta vez ese trabajador participó y lideró las agresiones».