EFE.- El Gobierno italiano ha trasladado a Bruselas que no hará un censo de gitanos con intención de expulsarlos, según informó la Comisión Europea (CE), que recordó que «las declaraciones que asocien conductas antisociales con personas» de un determinado origen étnico son «inaceptables».
«La Comisión ha entablado un diálogo con el Gobierno italiano y ha sido informada de que no hay planes de llevar a cabo un censo de la población gitana con intención de expulsarla», respondió la CE a una pregunta escrita dirigida a la comisaria de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género, Vera Jurova, y difundida hoy por la europarlamentaria liberal española Beatriz Becerra.
El pasado 18 de junio, el ministro del Interior italiano, Mateo Salvini, propuso censar a las personas de etnia gitana para expulsar a los que no hayan nacido en el país y lamentó que los que sean italianos habrá que «quedárselos».
La iniciativa del también líder de la ultraderechista Liga no se vio finalmente reflejada en el decreto aprobado por Roma el pasado 24 de septiembre para endurecer las condiciones de los solicitantes de asilo en el país, si bien el Gobierno transalpino reafirmó su intención de cerrar todos los campamentos de gitanos en Italia antes del final de la legislatura.
El Ejecutivo comunitario agregó en su contestación parlamentaria que «la Comisión seguirá supervisando la situación en los Estados miembros, incluida Italia, y está dispuesta a utilizar todos los medios disponibles, en el ámbito de sus competencias, en caso de detectar claras infracciones de la legislación europea».
En ese mismo escrito, subrayó que «el respeto de los derechos fundamentales, incluidos los derechos de las personas que pertenecen a minorías, es un valor fundacional clave de la UE», de forma que «las declaraciones que asocien conductas antisociales con personas de un determinado origen étnico o nacionalidad son estigmatizadoras e inaceptables».
Bruselas recordó que ese tipo de manifestaciones «contravienen los principios que llevaron a la adopción del marco europeo de estrategias nacionales de inclusión de los gitanos hasta 2020».
«La Comisión ha destacado reiteradamente que las autoridades públicas deben distanciarse de este tipo de discursos dirigidos a los gitanos y refutarlos activamente, así como luchar proactivamente contra conductas racistas y xenófobas», añadió el Ejecutivo comunitario en su respuesta.
La CE subrayó que «ni llevar a cabo un censo ni la expulsión entran dentro del ámbito de aplicación de la Directiva 2000/43/CE sobre igualdad racial».
