El Español.- La matanza perpetrada por la organización terrorista Hamás en Israel ha provocado un seísmo de consecuencias imprevisibles en países de Occidente. Una de esas posibles consecuencias es que comunidades judías sean víctimas de ataques yihadistas.
Según ha podido conocer EL ESPAÑOL de fuentes de la lucha antiterrorista, el Ministerio del Interior ha decidido reforzar la alerta antiterrorista de nivel 4, el segundo grado máximo en una escala de 5, y ha encargado a esas unidades que controlen y vigilen particularmente sinagogas, guarderías y colegios judíos.
La decisión se comunicó a las unidades antiterroristas a principios de esta misma semana y ya han comenzado las vigilancias discretas pero concienzudas en toda España.
Unidades de la Guardia Civil y la Policía Nacional han intensificado sus tareas ante la situación de riesgo actual. El objetivo es evitar el efecto contagio y que radicales que comparten los postulados de Hamás cometan acciones violentas contra los israelíes en territorio español.
Los investigadores también están monitorizando las consignas que se propagan en internet para anticiparse a posibles ataques a las comunidades judías.
Los especialistas en la lucha antiterrorista revisan foros, canales y espacios en los que los partidarios de Hamás podrían hacer un llamamiento a algún tipo de acción violenta.
La preocupación ha aumentado tras las recientes manifestaciones de algunos de los líderes de Hamás a nivel internacional. Este miércoles, Khaled Mashal, que dirigió el grupo terrorista entre 2014 y 2017, llamaba a los musulmanes de todo el mundo a que «salgan a las calles» este viernes a protestar contra Israel. Apeló a realizar una «jornada de ira» contra el sionismo, contra Israel y Estados Unidos, y llamó a una «yihad global».
Señalamiento
España mantiene desde 2015 el nivel 4 de alerta antiterrorista. Ese año comenzó una oleada de atentados en Europa (Charlie Hebdo en enero, el de París en la sala Bataclan en noviembre, Niza en verano de 2016). La crítica situación que se vivía en el continente llevó al Ministerio del Interior a intensificar la vigilancia sobre los radicales islamistas ubicados en España.
Aun así, en 2017 fueron los atentados de Cataluña, en Barcelona y Cambrils, en los que murieron 16 personas y más de un centenar y medio resultaron heridas.
El nivel 4 se mantiene todavía a día de hoy en nuestro país. En determinadas épocas del año, que suelen coincidir con las vacaciones o con fiestas de origen cristiano, ese nivel se intensifica. Ahora, tras lo que muchos han definido ya como «el 11-S de Israel», se ha decidido incrementar nuevamente esa atención.
La Plataforma Contra el Antisemitismo en España denunció hace unos días que el domingo, apenas unas horas después del macabro atentado de Hamás, aparecieron pintadas que rezaban «Free Palestina» en la puerta de una de sus sinagogas.
Interior teme que el ataque de Hamás a Israel, cuyo balance es de un millar de asesinatos en apenas un fin de semana y más de un centenar de secuestrados, pueda suscitar una ola de antisemitismo que se propague hacia otros puntos del planeta, principalmente a Europa.
Esta es una cuestión que preocupa sobremanera al departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska. Este verano se presentó el Informe sobre la evolución de los delitos de odio en España en el año 2022. Uno de los datos más preocupantes que se extraían del informe era el aumento de un 20 % en delitos de odio relacionados con el antisemitismo.