EFE. LA VANGUARDIA.- El profesor francés Abraham Bengio ha advertido del peligro del auge del antisemitismo ligado al de la extrema derecha que se está produciendo en Europa ante las próximas elecciones al Parlamento Europeo.
En entrevista con Efe, Bengio, director de la Comisión de Cultura de la Liga Internacional contra el Racismo y el Antisemitismo (LICRA), afirmó que «la ultraderecha, y con ella el antisemitismo, está resurgiendo no solo en Francia, sino también en Alemania, Italia, Polonia, o incluso en Brasil y Estados Unidos».
A juicio de Bengio, «hay un resurgimiento de la ultraderecha unido a otro del antisemitismo», que se manifiesta también -aunque sea de modo fragmentario- en fenómenos extraños, heteróclitos y eminentemente populistas, como el movimiento de los «chalecos amarillos», que ha protagonizado un buen número de algaradas en algunas ciudades francesas, particularmente en París.
El pasado febrero, algunas personas que participaban en una manifestación de los «chalecos amarillos» en París profirieron insultos de contenido antisemita al filósofo Alain Finkielkraut, de origen judío y uno de los más prestigiosos intelectuales franceses.
Asimismo, en los últimos meses se han llevado a cabo asaltos y profanaciones de cementerios judíos en Francia, entre ellas la cometida el pasado febrero en las proximidades del de Estrasburgo, en el que 96 tumbas fueron pintadas con cruces esvásticas y lemas antijudíos.
Bengio, quien pronuncia hoy una conferencia sobre antisemitismo en la sede de Casa Sefarad en Madrid, sostiene que «existe una convergencia» de carácter antisemita «entre ultraderecha, islamismo radical y extrema izquierda», que, en el caso de estos dos últimos, han establecido una especie de sinergia ideológica.
Dicha sinergia, afirma Bengio, ha conducido a «cambiar la lucha de clases por la lucha de razas», hasta llegar «al absurdo» de «esencializar» el concepto de raza, de tal modo que, por defender los derechos de un grupo étnico supuestamente conculcados, se ha rechazado a otro por el mero hecho de serlo.
Asimismo, Bengio se siente inquieto por el resultado de las elecciones al Parlamento Europeo que se celebrarán del 23 al 26 de mayo próximos, y sobre las que señala que la ultraderecha puede obtener «un resultado muy fuerte».
El auge de la ultraderecha se está produciendo, incluso, en países como Holanda o Suecia o Finlandia, que tradicionalmente han sido «refugio y modelo de tolerancia», afirmó Bengio.
«Confío en que, por la experiencia histórica, no se repita la situación del periodo de entreguerras», con el auge de los fascismos que desembocó finalmente en la II Guerra Mundial; «sin embargo, no vamos a negar que hay algunas analogías entre aquel momento y el actual que son peligrosas», subrayó.
Tras la euforia que se vivió tras el fin de la Guerra Fría y la caída del Muro de Berlín, cuando algunos filósofos y pensadores como el estadounidense Francis Fukuyama hablaban del «fin de la historia» y de un mundo nuevo en el que la democracia iba a ser el principio rector universal, se ha pasado a un escenario completamente diverso, reflexiona el intelectual francés.
En opinión de Bengio, «hemos llegado a un estado de desengaño que nos ha llevado a esta situación. Desengaño con Europa. Se está perdiendo el ideal de Europa como garantía de paz y estabilidad y cobra cada vez más fuerza la idea de la salida de Europa», encarnada por muchas de estas formaciones de ultraderecha.
«Quieren destruir Europa como la conocemos, como concepto incluso institucional», recalcó.
Aunque de momento está prácticamente circunscrito a Francia, el caso de los «chalecos amarillos» ejemplifica, de acuerdo con Bengio, el planteamiento de fondo que mueve a muchos de esos movimientos extremistas.
«Los chalecos amarillos -afirma- no han leído un libro en su vida ni escuchado una emisora de radio seria en su vida. Sus únicas lecturas son las páginas web ‘complotistas'» y que hablan de teorías de la conspiración, así como «medios rusos oficiales como Russia Today», y al tiempo comparten afinidades con los votantes del presidente de EEUU, Donald Trump.
En este sentido, Bengio incide en el papel que está desempeñando Rusia y en concreto su presidente, Vladimir Putin, en esta situación de crisis europea.
«Putin es uno de los líderes políticos más inteligentes del mundo. No hay más que ver cómo se ha hecho con el control en Siria» tras la defección de Occidente, sostiene.
«En Europa, Putin está utilizando armas que no son muy democráticas, como la desinformación, las fake news o medios oficiales como RT», afirma Bengio, quien recalca que la líder ultraderechista francesa, Marine Le Pen, ha obtenido créditos de la banca rusa para sostener su proyecto político.