El Periódico.- La Ertzaintza ha encontrado el zulo en una cavidad entre las rocas en una pared vertical a una altura de unos dos metros del suelo, hallándose el material ubicado en su interior cubierto con piedras.
Agentes de la Ertzaintza han localizado un zulo abandonado en una zona boscosa denominada «Arriona», en el monte Aizkorri, dentro del término municipal de Oñati (Guipúzcoa), que contenía diverso material explosivo en su interior y que presumiblemente era de ETA.
Según ha informado el Departamento vasco de Seguridad, a tenor de lo observado en la cavidad rocosa y, por la ubicación remota del hallazgo se interpreta que, con toda probabilidad, se trata de un escondite utilizado por la organización terrorista ETA.
La Ertzaintza ha encontrado el zulo en una cavidad entre las rocas en una pared vertical a una altura de unos dos metros del suelo, hallándose el material ubicado en su interior cubierto con piedras. En concreto, se han localizado ocho detonadores de diferentes tipos, restos de mecha, y una bolsa que contenía dos kilos de explosivo tipo goma.
Tras el hallazgo de estos elementos, agentes de la Ertzaintza han procedido a la apertura de diligencias policiales que serán remitidas al Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, tras realizar los estudios periciales correspondientes para determinar si los elementos fueron utilizados en acciones criminales.
La inspección de este «zulo» se enmarca en la investigación que mantiene la Ertzaintza, permanentemente abierta, con el objetivo de esclarecer «todos y cada uno de los atentados de ETA sin resolver».
En este sentido, la Ertzaintza ha recordado la importancia de poner en conocimiento, mediante el teléfono 112 o la comunicación con cualquier comisaría, cualquier localización de emplazamientos similares, en los cuales se observen bidones, baldes o neveras, sin registrar el lugar porque la posible presencia de artefactos explosivos en mal estado supone «un grave riesgo para la vida».
