EFE.- La Fiscalía portuguesa investiga la denuncia realizada por los actores brasileños Giovana Ewbank y Bruno Gagliasso, que divulgaron que dos de sus hijos, junto a otros clientes, sufrieron racismo en un restaurante en Portugal este fin de semana.
«Se confirma la existencia de investigaciones relacionadas con la materia en referencia», confirmó a EFE la entidad este miércoles.
Los hechos se produjeron este sábado, cuando los dos actores y sus hijos se encontraban en la terraza frente al mar del restaurante Clássico Beach Club (del Grupo Olivier), en Costa de Caparica (16 kilómetros al sur de Lisboa).
Allí «una mujer blanca, que pasaba frente al restaurante, insultó, deliberadamente, no solo a Títi y Bless (dos de sus hijos), sino también a una familia de turistas angoleños que estaban en el local -cerca de 15 personas negras», explicó la agencia Trigo Comunica en representación de la familia a través de su cuenta de Instagram.
Les pidió que todos ellos salieran del restaurante y volvieran a África y a los niños les dirigió insultos como «negros inmundos», precisó la agencia.
Tras una llamada de Gagliasso a la policía, agentes de seguridad llegaron al local y se llevaron a la mujer.
El matrimonio informó que iba a presentar una denuncia a la policía.
El caso, que despertó un gran interés mediático tanto en Portugal como en Brasil, provocó la reacción del Presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, que el domingo pidió que no se «generalice» la imagen de «sectores racistas y xenófobos».
«El comportamiento de la sociedad portuguesa es, en general, respetuoso de los derechos fundamentales y de la dignidad humana. Lo mismo puede decirse, en concreto, de las comunidades de los países hermanos de lengua portuguesa, que han ido aumentando su presencia entre nosotros y son motivo de gratitud y de orgullo para Portugal», divulgó Presidencia de la República lusa en un comunicado.
